Los productores de aceituna prevén recoger 200.000 kilos

Las lluvias que favorecieron las campañas de castañas y setas no ayudaron a los productores de aceituna gallegos. Lo apuntó el presidente de la Asociación de Produtores de Aceite e Aceituna de Galicia (APAAG), José Antonio García, apenas una semana antes del inicio de la recogida. “El verano no ayudó. Fue lluvioso y de poco calor. A la aceituna le costó desarrollarse”, comentó. Las previsiones que maneja el sector varían de unas zonas a otras, en función de las condiciones meteorológicas que registraron cada una de ellas. Así, mientras que en la provincia de Pontevedra la cosecha será muy floja, pues las lluvias coincidieron con los olivos a punto de polinizar, otras comarcas como Valdeorras o Quiroga se mantendrán en niveles similares a los del año pasado, en tanto que Ourense mejorará. “En general, tendremos una producción parecida a la del año pasado”, explicó José Antonio García. En 2020, los productores recolectaron entre 160.000 y 200.000 kilos de aceituna, un volumen que posibilitó la elaboración de aproximadamente 20.000 litros de aceite. Un año antes, en 2019, los aproximadamente 170 socios de APAAG habían recogido 145.000 kilos, que se tradujeron en 12.000 litros de aceite. En todo caso, los datos no son tan graves para un sector que antepone la calidad del producto a la cantidad, según expuso su presidente. Son aproximadamente 170 los productores de aceituna asociados a APAAG, estando localizados la gran mayoría en las provincias de Ourense y Pontevedra. Con una superficie de olivares que alcanza las 164 hectáreas, en ellas cultivan 180.000 árboles. A las circunstancias meteorológicas, José Antonio García añadió un segundo factor: “Son árboles jóvenes, poco formados, y en Galicia los suelos son ácidos y a las plantas les cuesta adaptarse”, explicó. Seguidamente, añadió que, si bien hay olivos centenerarios, “es un cultivo nuevo. Los productores se hicieron con el 90 % de los árboles ya crecidos. ¡Es la olivicultura heroica!”, puntualizó. Los productores miran al cielo, preparándose para recoger las primeras aceitunas dentro de una semana escasa. La competencia desleal, un problema Uno de los principales problemas que arrastra el sector del aceite y la aceituna en Galicia es la competencia desleal que supone la comercialización de aceites llegados de fuera de la Comunidad Autónoma y que son vendidos como si fuesen productos gallegos. “Con la competencia desleal estamos cada vez peor”, afirmó el presidente de APAAG. José Antonio García comentó que “venden su aceite como gallego y hacen mucho daño al sector. Venden lo que no es”, apuntó. Esta situación ya fue denunciada por el colectivo, aunque de momento sin obtener resultado alguno. El problema afecta gravemente a los productores de aceite gallegos, quienes se encuentran en el mercado aceites con “precios altos, pero más bajos que los que necesitamos en Galicia para comercializar nuestro aceite”, cuando estos prodcutos foráneos son adquiridos mucho más baratos. “Es un fraude”, insistió José Antonio García. El presidente de los productores de aceituna comentó que las restricciones de la pandemia afectaron gravemente al colectivo, al impedirle desarrollar su actividad habitual, que comienza a recuperar organizando nuevos cursos de formación para los socios.