El permiso concedido por el Concello a una pulpeira para colocar su caldeiro en la Praza Maior de Viana reabrió la polémica producida hace un año, cuando el equipo de gobierno del PP ordenó a Alfonso Fernández, padre del concejal bolés del PSOE, abandonar ese mismo lugar. Non nos parece normal que se nos bote para que outros fagan o mesmo, se quejó el edil.
La concesión de un permiso municipal para ubicar un puesto de pulpo en la Praza Maior de Viana reabrió la polémica que hace un año abrió el alcalde, Andrés Montesinos, cuando ordenó a Alfonso Fernández que trasladase su caldero a otro punto de la villa. La orden fue justificada en el posible daño que el calor de la cocción puede ocasionar en el piso de piedra, que había sido renovado unos meses antes. Además, el equipo de gobierno del PP se quejaba de las manchas de aceite que quedaban en el lugar.
A regañadientes y entre protestas, Alfonso Fernández acató la decisión municipal y cambió de ubicación su puesto. Desde ese momento, las aguas parecieron calmarse, al menos hasta este último lunes, coincidiendo con la feria. El lugar de la Praza Maior que ocupaba el vendedor de pulpo fue ocupado por una pulpeira y se reabrió una herida que parecía cicatrizada.
Este puesto lo lleva Antonia Alonso, quien afirma que temos permiso do Concello. Explica que le exigieron colocar dos planchas metálicas bajo el caldero y servir el pulpo en plato doble para non manchar. En su primer día al frente del puesto de la Praza Maior, esta pulpeira de Verín fue visitada por la Guardia Civil. Tras comprobar que poseía el carné de manipuladora de alimentos y que sus permisos estaban en regla, los agentes abandonaron el lugar.
Esta vendedora de pulpo asegura no tener nada contra o outro pulpeiro. É un máis que se gaña a vida. Pese a ello, hubo de soportar alguna queja de los vecinos por ocupar el lugar que dejó su predecesor.
Alfonso Fernández, hijo del pulpeiro expulsado de la Praza Maior y concejal del PSOE en el vecino Concello de O Bolo, también dice que su familia no tiene nada que reprochar a quien ocupa su lugar. En absoluto, o temos contra o alcalde, señaló. Afirma que la colocación de la plancha metálica y el uso de platos dobles faise en tódolos sitios. Non nos parece normal que se nos bote para que veña outro e faga o mesmo, protestó. Atribuye la decisión a una motivación política y sopesa denunciar al alcalde y acudir al Valedor do Pobo.
El alcalde en funciones de Viana, el popular Germán Domínguez, se mostró parco en sus declaraciones. Aseguró que el emplazamiento fue autorizado por el Concello pues os bares da praza pediron que se buscase a alguén. Añadió que se exige que non tiren aceite e que recollan o prato.
A regañadientes y entre protestas, Alfonso Fernández acató la decisión municipal y cambió de ubicación su puesto. Desde ese momento, las aguas parecieron calmarse, al menos hasta este último lunes, coincidiendo con la feria. El lugar de la Praza Maior que ocupaba el vendedor de pulpo fue ocupado por una pulpeira y se reabrió una herida que parecía cicatrizada.
Este puesto lo lleva Antonia Alonso, quien afirma que temos permiso do Concello. Explica que le exigieron colocar dos planchas metálicas bajo el caldero y servir el pulpo en plato doble para non manchar. En su primer día al frente del puesto de la Praza Maior, esta pulpeira de Verín fue visitada por la Guardia Civil. Tras comprobar que poseía el carné de manipuladora de alimentos y que sus permisos estaban en regla, los agentes abandonaron el lugar.
Esta vendedora de pulpo asegura no tener nada contra o outro pulpeiro. É un máis que se gaña a vida. Pese a ello, hubo de soportar alguna queja de los vecinos por ocupar el lugar que dejó su predecesor.
Alfonso Fernández, hijo del pulpeiro expulsado de la Praza Maior y concejal del PSOE en el vecino Concello de O Bolo, también dice que su familia no tiene nada que reprochar a quien ocupa su lugar. En absoluto, o temos contra o alcalde, señaló. Afirma que la colocación de la plancha metálica y el uso de platos dobles faise en tódolos sitios. Non nos parece normal que se nos bote para que veña outro e faga o mesmo, protestó. Atribuye la decisión a una motivación política y sopesa denunciar al alcalde y acudir al Valedor do Pobo.
El alcalde en funciones de Viana, el popular Germán Domínguez, se mostró parco en sus declaraciones. Aseguró que el emplazamiento fue autorizado por el Concello pues os bares da praza pediron que se buscase a alguén. Añadió que se exige que non tiren aceite e que recollan o prato.