También se manifestaron ante el Concello de Vilamartín reclamando una solución para la carretera OR-807
Unas 200 personas,entre trabajadores de las canteras y vecinos de la localidad de San Vicente, se movilizaron a lo largo de la jornada de ayer para reclamar una solución a la polémica carretera OU-807, que permanece cortada al tráfico desde hace 20 años debido al deterioro que sufre por actividad de una cantera de pizarra, dificultando el acceso al pueblo y generando problemas a otras dos canteras existentes en la zona.
Centenar y medio de trabajadores de las dos canteras afectadas y unos cincuenta vecinos de San Vicente se concentraron a partir de las 11 horas ante la Casa Consistorial de Vilamartín, con el ánimo de conocer la posició n de la alcaldesa, María Jesús Candal, sobre este conflicto. Según Enrique Álvarez Barreiro, concejal del PSOE en Vilamartín, "queríamos saber que ten pensado facer e se está cos veciños e os traballadores, pero a alcaldesa non apareceu en todo o día polo Concello".
A última hora de la mañana los concentrados, acompañados por varios agentes de la Guardia Civil, se dirigieron hasta la carretera N-120, en la que hicieron una sentada, cortando el tráfico durante unos diez minutos, sin que se produjera altercado alguno. El concejal Enrique Álvarez afirma que vecinos y trabajadores "xa están fartos de promesas. Despois de 20 años engañándoos xa é difícil de crer calquer solución ca que queiran sair agora".
Para el concejal socialista, "o que teñen que facer desde a Diputación provincial é cumplir o convenio firmado no ano 2010, no que se dicía que en 2014 a empresa da canteira, Cavima, entraría por un túnel, rechearíase a vaguada e recuperaríase a carretera. Que non veñan agora con proxectos cos que non están dacordo os veciños, que intentan levar a carretera por zonas que resultan intransitables ou que son inviables. Despois de tanto tempo, os veciños están fartos de que os engañen".
En esta nueva fase de las movilizaciones, trabajadores y vecinos se desplazarán hoy hasta Ourense, para concentrarse delante del edificio de la Diputación, y mañana miércoles viajarán a Santiago, para concentrarse ante la Dirección Xeral de Minas.
Ofrecimiento de la alcaldesa
La alcaldesa de Vilamartín, María Jesús Candal, estuvo durante toda la jornada de ayer fuera de la localidad, por reuniones que tenía concertadas desde hace días. La regidora señaló que ni los vecinos, ni los trabajadores de las canteras le solicitaron reunión alguna. "Estuve puntualmente informada de la concentración, que se desarrolló con normalidad, pero a mi nadie me había pedido reunión alguna".
La regidora reiteró que la solución del conflicto debe partir "de la Diputación. A mí que me digan qué gestiones quieren que haga y las haré". Candal está dispuesta a promover una reunión en la que participen los vecinos, las tres canteras y la Diputación. "Yo, si quieren -señala-, promoveré esa reunión, no hay problema ninguno, pero bien es cierto que todos deben colaborar y siendo conscientes de que el trazado actual es inviable".
Por su parte, desde la Diputación se insiste en una llamada al diálogo y a la colaboración y reiteraban que la solución para el problema de la carretera OR-807 está pendiente de informes técnicos que permitirán adoptar la opción más viable al conflicto. En este sentido, una empresa está trabajando en la redacción del proyecto, que contemplará tres opciones: rellenar la vaguada y reconstruir la carretera, una variante de la vía actual con terraplén sobre la vaguada y, en tercer lugar, un nuevo trazado con viaducto para superar la vaguada.
