La Unidade de Tuberculose del Complexo Hospitalario de Ourense realizó casi 400 pruebas para detectar la tuberculosis a alumnos de los institutos Martaguisela y Lauro Olmo y a unos 50 vecinos de O Barco. La detección de un caso en una sala de juegos de la zona escolar, cuyo paciente falleció en el complejo ourensano, activó el protocolo. El personal sanitario, que trabaja en coordinación con la Unidade de Medicina Preventiva del Hospital barquense, sometió a la tuberculina a los usuarios del local.
Un colectivo de 400 estudiantes de los institutos Martaguisela y Lauro Olmo de O Barco acudieron ayer al Centro de Saúde para someterse a la prueba de la tuberculina, que permite detectar la tuberculosis, según apuntó el Servizo Galego de Saúde (Sergas). Antes de llegar los estudiantes, el establecimiento había sido tomado por unas 50 personas, quienes solicitaron someterse a esa misma prueba. Todos tienen un rasgo común: ser clientes de la sala de juegos de la zona escolar donde se diagnosticó un caso de tuberculosis. El enfermo fallecía en el Complexo Hospitalario de Ourense, por lo que su familia también acudió al local sanitario.
Los alumnos de Bachillerato frecuentaban la sala en los recreos, explicó el director del Instituto Martaguisela, Antonio Liébana. Mientras, intentaba poner orden en la invasión estudiantil del Centro de Saúde. Los padres son los más preocupados. Hay alumnos de Primero, Segundo y Tercero de ESO que no iban por la sala de juegos, pero sus padres también pidieron que les hiciesen las pruebas, comentó.
Los alumnos abandonaron el Centro de Saúde con un cuestionario y un libro informativo acerca de la tuberculosis. Les fue entregado tras someterse a la prueba, cuya aplicación coordinó la Unidade de Tuberculose, dependiente del Servicio de Neumología del Complexo Hospitalario de Ourense. Sus integrantes regresarán el viernes para informar de los resultados. En esta labor recibieron el apoyo de la Unidade de Medicina Preventiva del Hospital Valdeorras.
Es una enfermedad infecciosa y contagiosa por vía aérea, explicó en O Barco Abel Rodríguez Canal, médico de la Unidade de Tuberculose desplazada. Añadió que su contagio no es tan fácil como una gripe. No obstante, sólo requiere estar al lado de un enfermo. El médico matizó que estamos buscando infectados, no enfermos.
Coordinación con el Hospital Valdeorras
Si alguien da positivo, se le aplica un tratamiento para que no enferme. En caso de que se le detecte la enfermedad, primero se aísla y después se le someterá a un tratamiento curativo, explicó el médico Abel Rodríguez. Durante su estancia en O Barco, el facultativo se reunió con los jefes de servicio de los Centros de Saúde de la comarca y con la dirección del Hospital Valdeorras para coordinar as actuacións a seguir, según apuntó el Sergas.
La Unidade de Tuberculose fue creada en 1997 dentro del Servicio de Neumoloxía, tiene su sede en el Complexo Hospitalario de Ourense, y su ámbito de actuación es provincial. La forman dos médicos, una enfermera y una trabajadora social. Lleva un registro de los casos y realiza estudios de los contactos de los enfermos.
Los alumnos de Bachillerato frecuentaban la sala en los recreos, explicó el director del Instituto Martaguisela, Antonio Liébana. Mientras, intentaba poner orden en la invasión estudiantil del Centro de Saúde. Los padres son los más preocupados. Hay alumnos de Primero, Segundo y Tercero de ESO que no iban por la sala de juegos, pero sus padres también pidieron que les hiciesen las pruebas, comentó.
Los alumnos abandonaron el Centro de Saúde con un cuestionario y un libro informativo acerca de la tuberculosis. Les fue entregado tras someterse a la prueba, cuya aplicación coordinó la Unidade de Tuberculose, dependiente del Servicio de Neumología del Complexo Hospitalario de Ourense. Sus integrantes regresarán el viernes para informar de los resultados. En esta labor recibieron el apoyo de la Unidade de Medicina Preventiva del Hospital Valdeorras.
Es una enfermedad infecciosa y contagiosa por vía aérea, explicó en O Barco Abel Rodríguez Canal, médico de la Unidade de Tuberculose desplazada. Añadió que su contagio no es tan fácil como una gripe. No obstante, sólo requiere estar al lado de un enfermo. El médico matizó que estamos buscando infectados, no enfermos.
Coordinación con el Hospital Valdeorras
Si alguien da positivo, se le aplica un tratamiento para que no enferme. En caso de que se le detecte la enfermedad, primero se aísla y después se le someterá a un tratamiento curativo, explicó el médico Abel Rodríguez. Durante su estancia en O Barco, el facultativo se reunió con los jefes de servicio de los Centros de Saúde de la comarca y con la dirección del Hospital Valdeorras para coordinar as actuacións a seguir, según apuntó el Sergas.
La Unidade de Tuberculose fue creada en 1997 dentro del Servicio de Neumoloxía, tiene su sede en el Complexo Hospitalario de Ourense, y su ámbito de actuación es provincial. La forman dos médicos, una enfermera y una trabajadora social. Lleva un registro de los casos y realiza estudios de los contactos de los enfermos.
