Si la pasada semana un grupo de vecinos de Viana do Bolo procedía a colgar el lardeiro en la Plaza Mayor del municipio, en la madrugada del miércoles al jueves, exactamente a las 00,00 horas, fue el turno de la lardeira. Elaborada una vez más a base de pana y pirotecnia, y vestida con ropa femenina, bajó acompañada desde el barrio del Toural por un grupo de personas que amenizaron el camino con sus bombos y azadas al ritmo del fulión. Una vez en el pilón de la Plaza Mayor, varios operarios del Concello procedieron a colocarla en el lugar que le corresponde, junto al lardeiro. Ambos se harán compañía hasta el próximo martes, en el que serán quemados para despedir el Entroido en una noche mágica para la localidad. Será a las 00,00 horas y fuliones de todas las aldeas y otros municipios vecinos tocarán hasta que el fuego se apague para despedir el Entroido de este 2022.
Antiguamente, al igual que el lardeiro, era elaborada con ropa que, en este caso, los mozos robaban a las mozas, algo que suponía una especie de “guerra” entre ambos sexos. Esta pareja típica de Entroido no solamente luce en la Plaza Mayor de Viana do Bolo, y es que otras aldeas de la localidad como Punxeiro o Fradelo tienen también sus propios lardeiros.
La entidad local ha recomendado no tirar harina, pero sería durante el momento de su cuelga cuando las mujeres “adquieren el poder” y lanzan este elemento a los hombres, algo que se convierte en generalizado durante el martes de carnaval, cuando las calles se teñían completamente de blanco.
