La legislatura del señor Sánchez ha sido desastrosa en todos los sentidos: político, económico, social… Es por ello, por lo que ahora la vicepresidenta segunda del Gobierno tiene intención de, con buenas palabras y siempre sonriente, atraer votantes del partido socialista que se ven asustados por la agresividad que ha mostrado el presidente.
Analizando a la señora vicepresidenta, comprobamos que: en definitiva, tiene un carácter mucho más amable y asertivo; que es más abierta a los medios y que tiene capacidad de atracción y persuasión; además, y para qué negarlo, a veces tiene buenas ideas (como por ejemplo, la subida del salario mínimo)
Pero no le será suficiente.
Tras el veto a Irene Montero (ministra de Igualdad) muchos de los votantes de UP, que en algún momento podrían haberse visto atraídos por el programa de Yolanda, se habrán indignado y enfadado con la presidenta de Sumar. Ya vamos restando votos. Durante la entrevista de Ana Rosa Quintana, en un momento le pregunta por este veto, Yolanda se ha mostrado evasiva y ha dado largas. No ha contestado de forma clara, más bien, no ha contestado. Se ha limitado a decir que la ley de “solo sí es sí” pudo haberse hecho mejor.
Por otro lado, la sra. vicepresidenta nunca se ha molestado en “criticar”, aunque tal vez no sea la expresión correcta, a Pedro Sánchez de machista, entre otros adjetivos. No sé qué tanta confianza puede aportar a los votantes socialistas, que tanto defienden el feminismo, que alguien de su propio gobierno le acuse de tal conducta.
En estos momentos se están disputando el tercer puesto en las encuestas Sumar y Vox. Desde luego, ninguno podrá jamás gobernar, ya que ambos han nacido para ser muletillas de los grandes, PSOE y PP respectivamente, pero sí que considero importante quién quede en este lugar ya que puede hacer caer la balanza a un lado u otro.
Ahora es el momento de ir libre y democráticamente a decir quién queremos que nos gobierne, es por ello por lo que animo a la participación masiva el día 23 de este mes. Es muy importante decidir quién llevará a sus espaldas nuestras vidas durante los próximos años.
