La frescura y la solvencia que demostraron todos los integrantes del equipo de fútbol de la selección española en su debut ante Costa Rica en el Mundial de Qatar, con su contundente y rotunda victoria por siete a cero, fue un auténtico chute de emoción a la que no nos tenían acostumbrados.
El eficaz trabajo de Luis Enrique y su apuesta por un equipo joven ha dado su frutos, y sus pupilos han ofrecido un juego vistoso, espectacular y muy esperanzador de cara a futuros compromisos.
Por primera vez, desde que se alcanzara la Copa del Mundo en 2010, hemos vuelto a vibrar y a creer que todo es posible, que tenemos un gran equipo capaz de todo. Aún es pronto para cantar victoria pero la selección ya nos ha cautivado, por lo que vamos a vivir este mundial muy ilusionados y confiados en nuestras posibilidades, porque lo vivido en el primer encuentro no ha sido un espejismo.
Ha sido el trabajo de todo el equipo y el acierto de Luis Enrique de elegir a los mejores que han compuesto una auténtica sintonía que aun resuena en nuestros oídos.
¡Bravo por ellos!
