Opinión

El brote del brote

Amaneció el martes de Entroido con una insólita combinación de buenas noticias: desciende el paro en febrero y aumenta el número de afiliados a la seguridad social.

Sí, sí. Y en Ourense, ese lugar en el que por tradición y dinámica habitual, todo llega más tarde que al resto del mundo, ¡también! Yo, personalmente, no pienso hacer ninguna fiesta antes de saber si la novedad que nos llega cuando colea con euforia el carnaval es un pasajero disfraz que se ha encontrado nuestro dramático escenario laboral o el embrión de un brote de un brote de un brote verde. Tampoco me voy a recrear leyendo esos otros datos, que los hay y en abundancia, que nos prestan argumentos para seguir anclados en el pesimismo. He decidido reposar de este Entroido bestial y esperar a ver que dicen los datos de marzo, pero sobre todo, a ver si mi cuñado Luis encuentra al fin un lugar donde trabajar. Luego lo celebraré.

Te puede interesar