He tenido la satisfacción de conocer a Dolores Delgado, una profesional íntegra y muy comprometida con los valores democráticos. No he tenido en cambio el honor de haber podido trabajar con ella, pero el tiempo pasado ya es solo eso. Ahora, como toda España sabe Dolores Delgado ha sido propuesta para fiscal general del Estado, por quien constitucionalmente debe hacerlo, el presidente del Gobierno. Y hay que cumplir así con los trámites preceptivos para que Delgado tome pronto posesión de esta grandísima responsabilidad.
Primero, hoy, en el CGPJ que todavía preside Carlos Lesmes. Un presidente que apartándose de los precedentes ha hecho a los 20 vocales una propuesta sobre Delgado que es la cuadratura del círculo. Porque si se cumplen los requisitos establecidos en la norma, se es entonces idóneo y no cabe más interpretación de la voluntad del legislador.
Ahora le toca a Dolores Delgado comparecer ante la Comisión de nombramientos del Congreso, lugar ese sí indicado para el juicio político que sobre su designación harán los grupos parlamentarios.
