Se ha estrenado la película 'Lincoln', de la que es director Steven Spielberg. Abraham Lincoln (1809-1865) es un personaje ante el que hay que descubrirse. Fue presidente de Estados Unidos cuando en los estados del sur de ese país la esclavitud de los negros era algo 'normal' y formaba parte imprescindible del sistema económico. Se trata de una de esas personas que te hacen confiar en la grandeza de la humanidad y en la gran verdad de que el mal nunca triunfa.
Pero para que el bien se imponga a veces es necesario 'sangre, sudor y lagrimas' (lo que Churchill prometió a los británicos cuando fue a la guerra contra Alemania). Lincoln no hizo esa promesa a los americanos, pero se enfrentó a los esclavistas con la misma determinación que Churchill a los nazis. Su decisión de acabar con la esclavitud en su país fue muy polémica en su tiempo (en realidad nadie que acabe con una injusticia arraigada social y económicamente puede evitar la polémica, sobre todo la que propician los que viven de ella). Sin embargo fue reconocido como un gran presidente y para honrar su memoria se erigió un monumento en Washington (Lincoln Memorial), en cuyo interior una estatua del personaje sentado mira hacía el Capitolio, formando una alineación con la cúpula de éste (sede del poder legislativo), el obelisco dedicado al presidente George Washington (el primero y el que consiguió la independencia) y su monumento.
Abraham Lincoln luchó por la libertad de una raza y tuvo que enfrentarse a una guerra civil no querida por él, lo que le causó un tremendo sufrimiento, hasta el punto de que parte de la familia de su esposa, nacida en un estado sureño, luchaba en el bando de los confederados esclavistas y alguno murió en la guerra. Pero Lincoln no solo logró la liberación física de los esclavos a través de las armas, sino que además puso todo su empeño en que la esclavitud fuese ilegal y para ello consiguió que se aprobase la Decimotercera Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos que así la declara. Sobre su lucha por la aprobación de esta Enmienda trata la película, aunque omite su vida como leñador, comerciante, jefe de correos y abogado. En ella se descubre a un hombre atormentado pero también sereno y pausado, lleno de sentido común, con las ideas claras, que razona legalmente sus decisiones y además utiliza anécdotas que siempre hacen pensar al que las oye.
La película refleja que la guerra fue muy dura, pero que la batalla por la primacía de la ley tuvo también muchas dificultades, porque él se ocupó de que en la aprobación de la Enmienda que prohíbe la esclavitud se siguiesen los procedimientos legales y que fuese votada por la mayoría reforzada necesaria (ganó la votación por dos votos en la Cámara de Representantes), lo que demuestra su grandeza y su sentido de la justicia. Abolirla por la fuerza de las armas no era suficiente. Si no se aprobaba la Enmienda, una vez acabada la guerra, la esclavitud volvería a ser legal en los estados sureños, lo cual convertiría el dolor de la nación en un drama (habrían luchado y muerto para nada). Lincoln asumió el riesgo por una causa justa y ello por ello fue asesinado a los pocos días de acabada la guerra. Su decisión determinó la vida de generaciones futuras. La abolición de la esclavitud no es algo lejano, en realidad ocurrió hace menos de 150 años. El actual presidente, Barack Obama, del Partido Demócrata, es de raza negra y de alguna manera culmina la obra de Lincoln, del Partido Republicano. Se da la paradoja de que fue el Demócrata el que se opuso con mayor determinación a la abolición de la esclavitud, siendo los republicanos los que consiguieron su aprobación.
La esclavitud, como 'institución legal', ha desaparecido, pero ello no quiere decir que no existan otros tipos de esclavitud, como la drogadicción, la trata de blancas, los niños soldados y la pobreza extrema. Acabar con estas formas de esclavitud es nuestra tarea y para ello nos debe servir como ejemplo la determinación, la valentía y el sentido de la justicia del alto y desgarbado Abraham Lincoln.
