Opinión

El comercio se conoce pero no se habla

Lunes, 18 - Se esconde, que no desaparece

La prostitución juega al escondite, dice cucú detrás de los clubes de carretera con guiños de neón. Dice, veo, veo, tras los visillos de aquel piso tan bien disimulado. Se esconde para ser encontrada, como los niños traviesos. Oculta su negocio en 64 pisos y 29 clubes de alterne de la provincia, según el recuento que hizo este periódico en su portada. Se acabó el escaparatismo, la farola y el bolso girando como aspas de un ventilador en la esquina de calles sin iluminar. No se fue, se escondió. La sociedad pureta se escandaliza y pone cordones sanitarios creyendo que ya se ha volatilizado la profesión más vieja del mundo, que se decía antes de forma eufemística. Contaba el periódico que los pisos ya duplican a los clubes. Detrás de la estadística y la moralina quedan personas que no salen en las fotos o que si lo hacen su rostro queda en una sombra, para no ser reconocidas. Decía una prostituta: "Vengo aquí desde hace muchos años para ganar algo de dinero, tengo una familia que sacar adelante". Por si algún día pensamos en algo más que estadísticas de pisos y clubes.

Martes, 19 - Otra gran conjunción de varios planetas

Siete diputados laboristas en el Parlamento británico han dicho basta y han mandado a paseo a su líder, Jeremy Corbyn, al que censuran alinearse con las tesis a favor del brexit. Los despechados se marcharon con sus actas de parlamentarios y se pasaron con armas y bagajes, sin descartar la creación de un nuevo partido más centrado. En contadas ocasiones hay conjunciones planetarias. La primera fue, como recordarán, la que barruntó aquella célebre ministra socialista Leyre Pajín, de la cantera de Zapatero, que predijo la coincidencia planetaria de tener  "a ambos lados del Atlántico a dos líderes progresistas" de dimensiones siderales como el propio Zapatero y un tal Obama. Esta semana se produjo otra conjunción planetaria: por una parte la dimisión de los diputados laboristas y por otro la dimisión del exalcalde y tres concejales de Piñor, que se van del PSOE. Alineados los planetas, unos se ven desde la city londinense, los otros desde la corredoira de la aldea.

Miércoles, 20 - As Burgas en los Presupuestos

Esta provincia ha se ha gustado cuando ha estructurado el discurso del aldraxe. Bueno, más bien el momento Calimero, nadie me quiere y cosas así. Las conciencias inflamables ardían, por ejemplo, con los Presupuestos Generales del Estado. Qué miseria, qué burla a la provincia, qué poco peso el de nuestros representantes. Qué les voy a contar. En fin, que el dinero no venía y los proyectos se acumulaban con telarañas. Decía el periódico que As Burgas agota otro mandato sin tener su plan turístico y termal. Vaya, algo administrativo que sigue empozado. As Burgas, que se sepa, no están en los Presupuestos del Estado, ni en los de la Xunta. Están ahí desde que la tierra es tierra y no hacemos lo que corresponde. Bueno, sí, algo se hizo con ellas. Casi hacerlas secar.

Jueves, 21 - Razones (muchas)para protestar

Un cierre comercial lamina una ilusión y mucho dinero, algo de historia y provoca un lamento porque la ciudad pierde algo suyo en ese camino que llevamos hacia la despersonalización. Los comerciantes, hartos de que las ventas mengüen y el futuro se escriba con ene de negro, se revolvieron contra sus principios para cerrar y manifestarse. Los mismos aguerridos comerciantes que abrían incluso en huelga general plantando cara a piquetes ha tomado la medicina de la movilización, a ver si así. Les sobran razones para exigir respeto para competir con dignidad. Deben hacer frente a una vorágine impositiva y una especulación por los alquileres que asfixia. Se sienten solos y el silencio en la caja registradora agiganta la desesperación. Cientos de personas —muchas más de las que acostumbran a expresarse en la calle— hicieron suyas sus reivindicaciones y al menos les apoyaron. ¿Y ahora qué? Seguro que el impulso que tomaron será a aprovechado para algo más que cerrar una tarde y manifestarse. Imagino que las organizaciones del sector repararán en que es mejor unirse que mantener pueriles enfrentamientos y quedarán mañana para acordar un programa de dinamización del comercio, para analizar si la administración tiene ayudas a la innovación, la renovación tecnológica o a la formación. Posiblemente analicen que, ya que no fueron capaces de organizar la Mostra da Oportunidade, si merece la pena cerrar la campaña de invierno sin una feria de eliminación de stocks. Verán si procede consensuar la celebración de la Shopping Night para evitar el sonrojo de la división del pasado año. Analizarán por qué las organizaciones del sector no ponen en marcha una plataforma de venta electrónica. Exigirán al Concello que la ciudad recupere dinamismo, limpieza y organice programas de captación de visitantes ante la llegada del AVE. Estudien cómo las administraciones les ayudarían a pinchar la burbuja de los alquileres de locales en dos calles, que asfixia a cualquiera. Valoren si procede crear un plan  para crear una marca que distinga al sector, cuya calidad está más que contrastada. Hace unos meses este periódico publicó un reportaje sobre comerciantes del centro. Se les hizo a todos una misma pregunta: ¿Crees en la colaboración y participas aportando ideas? Salvo uno, el resto dijo que no. Los comerciantes se conocen pero no se hablan. Y si lo hacen, no se entienden.

Viernes, 22 - Dos formas diferentes de hacer las catas

El titular no puede ser más positivo y esperanzador: Las catas avalan que en As Burgas hay agua para un gran balneario. Nada dice, de todos modos, sobre si las catas han medido capacidad institucional para hacer realidad el proyecto.

Sábado, 23 - Como me alegro que me haga esa pregunta

Y claro, como no se han hecho catas en las entendederas políticas, el panorama es variopinto: mira qué bien, gran proyecto, gran iniciativa que, por cierto, todos llevan en el programa electoral,  claro. Solo falta otro clásico: "como me alegro que me hagan esa pregunta". 

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