Según noticias, en el escándalo de "Nóos" el fiscal cree que la infanta está casi desamparada jurídicamente. Tan solo pequeños indicios, sin entidad relevante, permiten que doña Cristina caiga bajo la maledicencia de algunos.
Respecto a esto, el juez ha sido quien, en última instancia, decidió si la hermana del rey ha de sentarse o no en el banquillo de los acusados.
En el caso "Gurtel", el otro gran escándalo, nos informan los medios de comunicación de que el juez Ruz será relevado del caso en marzo. No obstante, se le concede la posibilidad de permanecer en el trabajo, pero sólo como juez ayudante, si así lo solicita. Todo ello será realidad en virtud del dictamen emitido por el Consejo Superior del poder Judicial.
Este organismo se compone de juristas "conservadores" y "progresistas", nombrados por el poder político. Estos calificativos referidos a quienes son autoridad dentro del ámbito de la justicia, me llevan en directo al barón de Montesquieu. Cuando este ilustrado formula su conocida teoría de la separación de los tres poderes del Estado, aclara la gran razón en la que se fundamenta. Al respecto, dice Montesquieu: "La libertad política existe sólo cuando no se abusa del poder... Y para que no sea posible abusar del poder es preciso que por la disposición de las cosas el poder frene al poder".
