Celebramos el “Día mundial del Medio Ambiente”, y aquí en Ourense se tuvo la buena idea de tener la “I Xornada de voluntariado ambiental” con el objeto de recoger “Residuos nas beiras do Miño, muy adecuado cuando ha saltado la alarma de que nos vamos a quedar sin agua potable, una contradicción cuando la superficie terrestre tiene más del 80% con agua. Sin hablar de la subterránea en todo el mundo (anomalía de Beijing, agua bajo el Sahara, Madrid uno río subterráneo con una anchura de Cibeles a Neptuno…).
Los ríos son el equivalente de las arterias humanas, y las basuras que los convierten en cloacas, los ateromas de las mismas, que sabemos que pueden producir un colapso en el ser humano. Lo mismo harán los vertidos que convierten los ríos en cloacas que desembocan son los océanos, en el gran pulmón terráqueo. Estos vertidos, entre los que es frecuente encontrar medicamentos o profilácticos que salvan muchas vidas, pueden ser mortíferos para las especies que viven en los ríos y el mar, ayudan al calentamiento global y, sin dudarlo, al cambio climático. Estos vertidos modifican las corrientes oceánicas que repercuten en el clima, sequías, ciclones…
Pocos son los ríos limpios, y los humanos vertimos todo lo que nos molesta cuando no encontramos donde dejarlo. Hay que ver cuando se draga un río o se vacía un embalse lo que se puede encontrar. Al margen de las "reservas naturales", concienciémonos que el reciclaje no es suficiente, las arterias del Planeta Azul pueden llevarnos al colapso, ahí sí que hay más peligro que en los gases CO2, NO2, metano…. La semana pasada se conmemoró el Día de los Océanos, dándole la importancia que realmente tienen en el clima y los alimentos, e incluso si fuese necesaria una fuente de agua más barata que la obtenida hasta ahora por utilizar un nuevo método con isótopos radioactivos.
El agua embalsada al día de hoy supera en las mayorías de las cuencas españolas el 90%. Tuvieron que abrir las compuertas por la cantidad de agua caída, y las inundaciones fueron frecuentes. Se hablará de sequía, y es cierto porque en un alto grado están contaminadas, Francisco Martín (presidente de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil) dice que el 76% de la cuenca gallega tiene "un estado excelente".
