Opinión

¡Vamos!

El deporte es solo hoy y por eso es normal que la ilusión de hace no muchas semanas parezca de otra temporada. Es el mismo COB y el mismo Pazo que arrinconaron al Betis hasta tumbarlo y que sacaron pecho con un liderato impensable antes de empezar la liga. Cuando el balance actual lo habría firmado la mayoría, pero no de esta forma.

Este COB no pierde ni deja de competir por falta de implicación. Todo lo contrario. Empezó a caerse por lesiones consecutivas y agrandó los problemas por las ganas de querer seguir ilusionando e ilusionándose y verse impotentes jugando, pero también entrenando. Pocos COB ha habido en los últimos años tan unidos, implicados y honrados en el día a día. Es una plantilla impecable, pero a la que le falta mala leche en el juego y agresividad en la competición. No saber morder. Es débil en los malos momentos y disperso cuando no lo azuzan. Y eso no tiene la gravedad de los vagos o los egoistas, pero también es un problema y obliga a ponerle remedio.

El Pazo está doctorado en equipos de todos los estilos y a este lo caló pronto. Por eso sé que lo volverá a empujar desde el principio para demostrarle ese “aquí estamos nosotros” que tanto necesitan. Es equipo es trigo limpio y hoy, cuando más espera el Pazo de ellos, ellos más necesitan los ánimos. Hasta que suene la bocina. La afición lo está pasando mal, pero ellos todavía peor. 

Te puede interesar