Opinión

The Rollings Stones: “Hackney diamonds” y la grandeza de los genuinos forajidos del rock’n’roll

Portada de “Hackney diamonds”, el nuevo disco de The Rollings Stones.
photo_camera Portada de “Hackney diamonds”, el nuevo disco de The Rollings Stones.

Sí, con toda seguridad Mick Jagger disfruta de vestirse de gala y de codearse con la realeza inglesa y de presentarse como un emblema del Imperio Británico cuando viaja a Francia y saluda con pajarita a Emmanuel Macron, de igual manera que Keith Richards vive como un rey en su mansión jamaicana de Ocho Ríos. Pero por mucho que quieran ocultarlo – que no creo que lo quieran en el fondo- Mick, Keith y Ronnie, acompañados ahora de Steve Jordan y en muchas ocasiones no suficientemente valorado Darryl Jones, siguen siendo y lo serán hasta el día en que cierren los ojos, unos forajidos del rock’n’roll.

¿En qué me baso para establecer esta afirmación? Pues ni más ni menos, en su nuevo disco, en ese esperadísimo álbum que ha tardado casi 20 años en llegar y que desde este pasado 20 de octubre por fin podemos escuchar, apreciar y disfrutar en toda su integridad. “Hackney Diamonds”, el nuevo disco de los Rolling Stones, es un álbum que, por un lado, muestra que sin duda de manera muy inteligente, han sabido elegir a un productor como Andrew Watt, que tuvo claro lo que Mick y Keith pedían: poner al día su sonido sin perder la esencia puramente Stones que sus fans no perdonaron que se difuminaran en discos como “Undercover” en los años 80.

Por otro, el nuevo álbum de los Stones, es esencialmente un álbum de rock. De puro rock, sin perjuicio de que contenga muchas piezas que les reconcilian con sus incursiones en el blues, el country, el soul y que albergue pinceladas musicales de muchos estilos diferentes, pero que de una u otra forma, se amalgaman bien, forman esa argamasa creativa que conforma “Hackney Diamonds”.

Si hemos de empezar por la cara más rockera… ¿Qué tenemos? Pues en primer lugar, la canción que sirvió como primer adelanto del disco, “Angry”, que no es en modo alguno una isla musical aislada en el archipiélago. No, esa cara rockera, sucia, suburbial que el grupo nunca abandonó, la encontramos en “Bite My Head Off”, un rock casi punk, crudo, visceral y guitarrero que indudablemente hará las delicias de sus fans más rockeros, al igual que “Whole Wild World”, “Live By The Sword” o “Drive Me Too Hard”, canciones en las que el grupo opta por mostrar su cara más rockera, sin dejar en modo alguno de dejar la huella, el deje o el toque, como se le prefiera llamar, más puramente Stone.

Dijo Mick Jagger en la presentación del disco en el show de la estrella televisiva Jimmy Fallon a comienzos de septiembre: “Si hubiera dependido de Keith, todo este disco hubiera sido como “Angry”, pero yo quería que hubiera más variedad, más cosas diferentes”. Bien, sin duda objetivo cumplido. Si en “Mess It Up” encontramos a los Stones, llamémoslos así, más pop, también tenemos en “Hackney Diamonds” a unos Stones devotos del más puro blues del que se nutrieron y aprendieron en sus comienzos como en la maravilla que cierra el disco, “Rolling Stone Blues”, cultivadores de un rock que entronca a la perfección con esa genial época de finales de los años 60 y primeros 70 en “Depending On You”, “Get Close” o la maravillosa “Dreamy Skies”, que pareciera sacada de la época Gram Parsons, con ese maravilloso aire dylaniano y la impagable armónica de Mick Jagger. Sin obviar “Tell Me Straight”, la balada cantada por Keith Richards y esa maravillosa creación de rock progresivo con arreglos orquestales y coros de Lady Gaga llamada “Sweet Sounds Of Heaven”, una maravillosa pieza que por sí sola, da a este álbum el marchamo de masterpiece.

En las horas inmediatamente anteriores a las doce de la noche del 20 de octubre, la emisora de radio Rock FM, con toda la plana mayor de sus locutores y presentadores – Mariskal Romero, El Pirata, Rodri Contreras, Marta Vázquez, Nat Simmons, Jorge Vileya- organizó una fiesta de presentación del disco en la cual intervino quien suscribe estas líneas al lado de músicos como Jorge Salán, Javier Vargas, Jorge Escobedo de Sôber, Judith Mateo y Chusé Joven, Carlos Tarque de M-Clan, Alén Ayerdi de Marea y El Dromedario Records, Javier Gurrutxaga, el conocido y reputado coleccionista y galerista Alberto Sánchez-Runde o Alejo Stivell de Tequila entre otros, dejaron sus primeras impresiones y opiniones sobre “Hackney Diamonds”, el esperadísimo nuevo disco que por fin hoy podemos tener en nuestras manos, de los Rolling Stones.

Los Stones, siempre los Stones…

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