La diferencia entre que te acusaran de un delito con la ley anterior o de una falta con la nueva Ley de Seguridad Ciudadana la puede explicar perfectamente doña Domitila Vicente, una preferentista de 82 años que se mueve con un andador, que fue multada “por saltar una valla” policial durante una protesta en una localidad pontevedresa. De un juez depende su absolución –otros ya han sentenciado en casos similares a favor de los acusados- y otra veintena de personas en situación similar –estafados- esperan juicio. Con la nueva “ley mordaza”, te cascan la multa por vía gubernativa, se recauda y de paso se alivia de trabajo a los juzgados. Y la irracionalidad de las multas, como es el caso, queda impune.
