Si los mercados financieros tienen miedo es que el miedo es real. Se suele afirmar que no hay nada más miedoso que el dinero, siempre buscando un refugio seguro cuando no puede salir a campo abierto a especular. Las Bolsas andan por estos días a la baja a la espera de los resultados electorales del primer martes después del primer lunes de noviembre por si el miércoles de la próxima semana el mundo se despierta con Donald Trump al frente de los EE UU. Y nos entra una congoja insuperable por lo que pueda ocurrir. Con Trump pierde todo el mundo, los inversores, quienes pueden ser expulsados del país, las minorías no WASP y los que se vean arrastrados a sus aventuras por venir dado su talento y su talante. Confiemos en los estadounidenses.
