Dicen los de la zona que la playa de Baltar -en plena zona urbana de Portonovo- es muy cómoda para sus habitantes, pero no la consideran entre las mejores; se entiende si tenemos en cuenta lo mucho que se congratulan y fardan los portonoveses de que los buenos arenales de Sanxenxo están precisamente en Portonovo. Como acontece muy frecuentemente en Galicia, también aquí la rivalidad parroquial es una constante. No voy a descubrir tal sentir a estas alturas, aunque si me dejo influir por algunos portonoveses, la posición de Portonovo, en su relación con el mar, es el motivo del éxito. Hace ya unos años, un hostelero de Portonovo me solicita apoyo para la segregación, y así la actual parroquia pasara a ser otro concello diferente al de Sanxenxo, 'como o da Illa de Arousa', me vino a decir; explicándome los motivos con todo lujo de detalles: 'A posición de Portonovo fainos diferentes, para ben. Ainda que non recibimos igual trato que Sanxenxo'. Esta opinión fue realizada antes de esta legislatura municipal; quizás el sentimiento haya cambiado, en parte, actualmente?
Aun así, como cada año, Portonovo volvió a cumplir con la tradición estival de conquistar un trocito de Sanxenxo. De lo que se trata es de que un cuerpo de elite de portonoveses tome la roca en la que se encuentra enclavada la escultura de la Madama, frente a la playa de Silgar, en Sanxenxo. ¡No se crean que la cosa no tiene algo más que folclore y simbolismo! Los jóvenes de Portonovo prepararon, con una fiesta previa en la villa, el asalto a la Madama. Y durante un par de horas, una vez tomada la Madama, ondea la enseña arlequinada de Portonovo en el minúsculo islote, donde reina este símbolo de la relación de Sanxenxo con el mar. Toda una ventaja de su posición con el mar, se justifica.
Pero este año, después de una década de celebraciones, los vecinos y hosteleros mostraron su malestar por los incidentes del asalto a la Madama; reclamaron un ejercicio de responsabilidad a organizadores y políticos para evitar males mayores a los registrados el día 18 de agosto con motivo de las fiestas de San Roque. Y es que, los enfrentamientos registrados entre los jóvenes de la villa marinera, cerca de un centenar, y otros cuarenta de Sanxenxo que los esperaban ?números de un periódico local- en la escultura para impedir que ésta fuera tomada por los asaltantes, se saldo con contusiones debido a forcejeos, incluidas agresiones. ¡Como de verdad, vamos!
Las respectivas posiciones de Portonovo y Sanxenxo hacen que, según lo que se quiera comparar y para que, sus posiciones jueguen un tanto a favor hacia una villa o la otra. Después cada parroquiano le otorga el valor añadido que desea, y hasta donde pretenda. Pero en esto del microclima, con más horas y calidad de sol; número, superficie y calidad de arenales, la posición es un factor determinante, ¡y vaya si no lo tienen en cuenta! en el caso del que hablamos. Un problema de posición es lo que murmura alguien si se siente agraviado ?pocas veces-, o lo que espetan los que se sienten superiores al referirse al otro, para dar a valer sus justificaciones.
Jugando dos portugueses a la pala, en la playa de Baltar, uno pierde el tanto al botarle la pelota y salirle disparada en sentido contrario al esperado. El perdedor se lamenta: 'Un problema de posición? pa'. Los problemas en las posiciones son recurrentes en la cotidianidad del discurrir de la vida. Basta observar como sale a la palestra el ministro de Fomento para anunciar que hay que subir impuestos, en vista de las prestaciones que recibimos; no se pronuncia sobre los sueldos, a no ser que crea que todos son como el de un ministro o el de los controladores. Pero existe un claro problema de posición: no lo hace el presidente del Gobierno o la ministra del ramo, que son los responsables en la materia. La ministra matiza, o rectifica, a hechos consumados, en otro alarde de problema de posición, ya que la ministra se supone que es la que anuncia, y no la que matiza lo que es de su competencia. Acude al conflicto de Melilla un ex presidente, motivo de crítica del Gobierno, pero este no se presenta cuando tendría que haberlo hecho; en su lugar telefonea el Rey? 'Problemas de posición' por todos los lados: en territorios, jugando a la pala, economía, en conflictos. Hasta ahora se trataba de gestionar los tiempos. Ya toca gestionar la posición.
