Opinión

El desencanto

Anxo Quintana eligió el Foro La Región para regresar al debate público el pasado mes de octubre. En un salón abarrotado y en presencia de Xavier Vence, actual portavoz del BNG, reflexionó sobre la necesidad de que el frente nacionalista contase con candidaturas en todos los concellos de Galicia en las próximas elecciones municipales. La advertencia no fue por despecho, como alguien pudo pensar tras dar un paso atrás después de que Alberto Núñez Feijóo recuperase la Xunta para el PP.
Han pasado los meses y el pesimista pronóstico de Quintana puede que se confirme. Ya parece improbable que el Bloque pueda aspirar a presentarse en los 314 concellos de esta tierra de aristas y de artistas. También los socialistas gallegos lo tienen crudo para cerrar las listas en todos los municipios y eso que eligieron en primarias a José Ramón Gómez Besteiro como secretario general. Sólo el PP tiene garantizada la papeleta en todos los ayuntamientos.
A otra fuerza de nuevo cuño como Podemos se le escapan militantes cada día que pasa, quizá por las informaciones sobre la relación  de un dirigente como Juan Carlos Monedero con el régimen venezolano o porque el grado de desencanto en la sociedad es descorazonador. Y la larga campaña no ha hecho más que empezar.  El pasado jueves, en el municipio coruñés de As Pontes, se produjeron colas kilométricas de trabajadores desesperados para conseguir un empleo temporal en la central térmica. Es la imagen de un país que empieza a marchar según la macroeconomía pero continúa tiritando si se revisa el bolsillo del personal. Hace unos años, un compañero de universidad se dedicó a hacer coleteros a destajo para una tienda de chinos. Se pasaba todo el día en pijama trabajando por cuatro perras. El otro día lo recordaba con humor: "Yo fui el primer explotado por los chinos. Pensaba que me pagaban poco, pero hoy empiezo a creer que igual tengo que volver a hacerlo".
En una situación como la actual, lo lógico sería que la peña tuviese la sana necesidad de cambiar al que está al mando, pero lo cierto es que el PP cuenta con más afiliados y simpatizantes. Es tan inexplicable como las encuestas que dicen que el PSOE volverá a ganar en Andalucía.

Te puede interesar