Siguiendo el ejemplo de reconocer el trabajo invisible del equipo como hacen los deportistas al terminar su competición en los Juegos de Tokio, la conviviente regresó sudorosa del tajo por el esprint que acababa de realizar para no perderse a Adrián Ben en la final de 800 metros. Los resultados de la jornada en una mano, el teléfono con los horarios de las pruebas que quedaban en la otra. “Hoy tendrás que hablar del vigués Nico Rodríguez, que consiguió el bronce en la clase 470 de vela con el catalán Jordi Xammar, pero eso te lo cuento luego que van a salir”.
Como después confesó el atleta de Viveiro, también creía que “cogería medalla” al llegar en el lío al cambio de los últimos 100 metros, pero Ben supo a falta de 50 que las piernas no tenían otra marcha mientras ella porfía en que se le escapó la chapa. La presencia en la final ya era la mejor actuación de la historia del atletismo español en la prueba, el quinto puesto el día que cumplía 23 años es un regalo para abrir en los Juegos de París.
Las chicas del baloncesto ya habían comenzado a disputar los cuartos contra Francia. “Pues va a ser cierto lo de Galicia Calidade”, comentó al enterarse de que el seleccionador Lucas Mondelo es valdeorrés y la ala-pívot Raquel Carrera ourensana. “Si hasta participó en skate Julia Benedetti, una coruñesa de 16 años, aunque no se metió en la final”. Puede sonar a chovinismo galaico, pero los datos hablan sin forofismo: de las 10 medallas que ha sumado España, Galicia aporta participación en tres, Andalucía y Madrid en dos y Asturias, Baleares, Canarias, Cataluña y País Vasco en una. El pase a semifinales del waterpolo masculino –antes lo hizo el femenino– y de las cinco embarcaciones del piragüismo compensaron el chasco por la inesperada derrota de las jugadoras de Mondelo. Tuvieron el pase a tiro, habían ganado a Francia en las finales europeas de 2013, 2017 y 2019, pero tres puntos en un final agónico las apartaron de una medalla que parecía garantizada. “Pues ya tienes el titular: “ganar, soplar y quedarse a dos velas”. Feito, como diría Baltar.
