El día que Pedro Sánchez catapultó a José Miñones a la Delegación del Gobierno en Galicia desde la Alcaldía de Ames, un militante del PP aseguró con gesto de preocupación que se trataba de un gran rival para disputarle la Xunta a Núñez Feijóo. El presidente del Gobierno anunció ayer por la mañana que Miñones sustituirá a Carolina Darias –encabezará la lista a la Alcaldía de Las Palmas– en el Ministerio de Sanidad, y la sensación del militante popular pareció confirmada, sólo que el rival del PP a la Xunta será Alfonso Rueda y no Núñez Feijóo. La decisión de Valentín Gonzalez Formoso de compatibilizar la secretaría xeral del PSdeG con la candidatura al Concello de As Pontes llevaba unas semanas cebando las hipótesis sobre el cabeza de cartel de los socialistas gallegos en las autonómicas del próximo año.
Al mediodía se daba por descontado que el Consejo de Ministros servirá de lanzadera para la carrera política en Galicia de José Miñones, como sucedió con Salvador Illa en Cataluña o ahora con Carolina Darias y Reyes Maroto, que sale del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo para luchar por la ciudad de Madrid. Miñones alojó a Sánchez en su casa durante la gira del Peugeot y el futuro parecía diseñado, pero a media tarde se sumó otro nombre con muchas bazas a la ecuación. Tras archivarse todas las causas con las que la jueza Pilar de Lara trizó las opciones de José Ramón Gómez Besteiro para presidir la Xunta en 2016, Sánchez ha decidido situarlo en primera línea política al nombrarlo delegado del Gobierno en sustitución del propio Miñones.
La decisión no es gratuita, ya que Besteiro estaba en la terna para asumir el ministerio hasta el último momento, según fuentes socialistas. El PSdeG acudió a las dos últimas elecciones autonómicas con candidatos sólidos en lo académico pero nulos en tirón electoral, como Xoaquín Fernández Leiceaga en 2016 y Gonzalo Caballero en 2020. Quedó de tercera fuerza en el Parlamento. Ahora dispone de tres perfiles fogueados en el banquillo para salir a jugar en cualquier momento. Valentín González Formoso parece no querer tras mostrar su disposición a apartarse si Besteiro se lo pide, Miñones es del gusto de Abel Caballero, pero ya dirá Pedro.
