Opinión

Una tirada, dos premios

A un tipo de una aldea cercana a Santiago le tocó hace un tiempo una millonada después de que su contraria le obligase a firmar la separación de bienes porque la suegra quería comprar una finca y lo consideraba un vividor, aunque no pasaba de bebedor.


Es difícil conseguir dos premios de una tirada, como ahora también le ha sucedido a un camarero cincuentón de Roquetas de Mar. Entre los recientes sorteos de Navidad y El Niño se ha embolsado 1,2 millones de euros. A veces te sonríe la chiripa. Desde Lisboa, Pedro Sánchez proclamó que va a intentar presidir España con una gran coalición de izquierdas si Mariano Rajoy fracasa en su intento de continuar en La Moncloa, pero sus palabras sonaron a fado. Sería una manera de apuntalar el liderazgo en el PSOE después de perder 30 escaños en las pasadas elecciones, pero no parece probable que le vaya a sonreír la suerte. Es tan difícil que Podemos renuncie a un referéndum soberanista en Cataluña como prometió, como que Susana Díaz facilite la jugada, aunque se lo diga desde la sede lisboeta de los socialistas portugueses. 


El sopapo electoral de Mariano Rajoy también fue escalofriante, pero en su partido nadie lo discute en público, aunque en privado practiquen el empujón, y no sería descabellado jugársela a que será el candidato del PP en caso de que haya que acudir otra vez a las urnas. Rajoy es un hombre suertudo. Ganó el sorteo que hizo Aznar para nombrar sustituto, el incendio provocado por Artur Mas se lo está apagando la CUP... Es su último boleto, pero se la jugaría con un PSOE tronzado y amenazado por la marea de Podemos, y con el 'ciudadano' Albert Rivera, cada vez más fundido o confundido, según el día. En ocasiones vuelve a tocar. 

Te puede interesar