REPORTAJE

¿Quién pintó el peto?

<p></p>
photo_camera La arquitectura forma parte de la fachada de una vivienda ubicada en medio del lugar.

El pueblo de Rebordechá, en Xinzo, conserva uno de los pocos petos de ánimas que existen en la zona. El monumento religioso, catalogado como bien patrimonial, presenta una curiosa apariencia. 

"¡Eso leva así toda a vida!", dicen los vecinos y vecinas del lugar de Rebordechá, en Xinzo de Limia, en alusión a su peto de ánimas y a su curioso repintado. La arquitectura religiosa está integrada en la fachada de una vivienda, ubicada en mitad del pueblo, y data del año 1786. La Xunta de Galicia la tiene catalogada como Patrimonio Cultural y como uno de los monumentos que se pueden visitar al atravesar la Vía da Prata, en la comarca limiana. "Leva moitos anos así. Pintouse de novo antes de que se metera en Patrimonio, algo que ocorreu non hai moito tempo", dice Carmen Rodríguez, heredera de la vivienda que alberga la arquitectura. "Eu acórdoo toda a vida do mesmo xeito e coa mesma pintura", añade.

Otra Carmen, tía abuela de la primera y cuya vivienda está anexa al monumento patrimonial, cuenta la historia del Peto de Rebordechá. Precisamente, es la Virgen del Carmen quien preside, sosteniendo un escapulario, la figura religiosa. Está acompañada de San Antonio que aparece, a su vez, con un libro. "O meu bisavó, Manuel Rodríguez, cando regresou do estranxeiro, hai moitísimos anos, encaprichouse e fixo o peto aí. Foi no 1786", explica la vecina. "Esta casa sufriu un incendio e venderon dúas fías de pedra por eso agora é máis baixa. O peto tiña dúas chapas de lata cun burato polo que a xente devota botaba o diñeiro. Xa depois, recordo que o meu pai quitaba os cuartos e os levaba ao cura do pobo para que oficiase misas no recordo deses fieis. Tamén viñan moitos portugueses", añade.

Todavía son algunos los fieles que realizan sus peticiones a los santos. "O ano pasado aínda meteron aquí diñeiro e saqueino eu. Funo levar á capela e prendín velas por esa xente", cuenta Carmen.

Las vecinas echan en falta que Patrimonio realicen más tareas de mantenimiento de la estructura. Aseguran, además, que no les permite realizar, ahora, ningún tipo de actuación en ella y que el ente autonómico paralizó el mantenimiento que estaban acometiendo con una subvención que recibió el pueblo para ese fin. Sin embargo, nadie aclara en Rebordachá quien acometió el pintado del peto, ni siquiera el alcalde pedáneo, que dice desconocerlo. Tampoco las "cármenes". "En un momento dado, la gente que lo hizo o mandó hacer, trató de que el resultado fuera similar a como era antes, puesto que estaba muy deteriorado", dice José González, pedáneo de Rebordechá. "Hace unos 14 años se recibió una pequeña ayuda para mejorar algunos monumentos. El señor de la casa mandó pintar, pero no sé a quien".

El edil de Cultura de Xinzo, Carlos Gómez, aseguró desconocer este tema puesto que por aquel entonces "no era concejal".

Te puede interesar