Al compás del sonido de las chocas, recorrieron los troteiros de Bande distintos pueblos y aldeas del ayuntamiento anunciando la inminente celebración del Entroido. Jóvenes y mayores, familias con niños y grupos de amigos compartieron una jornada única en la que se conmemoró el décimo aniversario de la recuperación de esta singular tradición. Tras el recorrido por el rural, los troteiros volverán a las calles de Bande el domingo y el martes de carnaval, con motivo del desfile de carrozas y comparsas.
Las distintas parroquias del Concello de Bande recibieron ayer una singular comitiva anunciando la llegada del Entroido. Los troteiros, la figura típica del carnaval local, recorrieron más de 30 kilómetros en coche y otros diez trotando, para expandir el espíritu de Don Carnaval en los distintos pueblos y aldeas del ayuntamiento. Para muchos vecinos, sobre todo los de más edad, esta es la única oportunidad de disfrutar del Entroido, ¡y nosotros con ellos!, resaltaban Luis Rodríguez y José Luis Feijóo, dos asiduos a la celebración.
Ataviados con trajes blancos adornados con cintas de colores, capa de ganchillo, chocas, vara y un curioso gorro en cuya copa lleva postales, fotos antiguas y un espejo, a las once de la mañana se daban cita en la Praza da Constitución una veintena de troteiros dispuestos a hacerse oír. Vamos tomar un chupito de licor café para pasar o frío, aconsejaban los más mayores. Mientras, los jóvenes de la comitiva ensayaban en el parque los mejores movimientos para hacer sonar sus chocas. O mellor e ir correndo e bailar polos pobos, onde a xente nos espera con emoción, confesaba la joven Lorena, ante la mirada atenta de su amiga Ares que, con tan sólo ocho años, ayer se inició en este arte. Estoy bastante nerviosa, confesaba antes de subirse al autobús en dirección a Sarreaus. La primera parada de un itinerario que siguió por Santiago de Calvos, Corvelle, Santa Comba, Ribeiro, Vilameá de Bande y Martiñán.
Décimo aniversario
A permanencia da festa está asegurada cas novas xeracións, coincidían los troteiros de más edad que ayer estaban de aniversario. Hace diez años, el Concello de Bande incentivó la recuperación de una figura típica del Entroido local que se había perdido a raíz de la Guerra Civil. Había varias versiones, así que se estuvo investigando y finalmente se cogió aquellos elementos comunes a todos los trajes, recordaban los presentes. Ayer, después de diez horas de troula, donde no faltó el buen ambiente y la comida tradicional, los troteiros cerraban el día con un baile orquestado desde la charanga Os Bandiños. La siguiente salida, el domingo y el martes del Entroido, coincidiendo con los desfiles de carrozas y comparas.
Celanova se rinde ante las comadres
Un grupo musical y más de trescientas mujeres con ganas de pasarlo bien expandieron ayer la festividad del Entroido en una villa con escasa tradición carnavalera. Celanova celebró con éxito la segunda fiesta de comadres con un animado baile de disfraces en el salón de actos del Claustro Barroco que contó con una resaltable afluencia de hombres vestidos de féminas.
Ataviados con trajes blancos adornados con cintas de colores, capa de ganchillo, chocas, vara y un curioso gorro en cuya copa lleva postales, fotos antiguas y un espejo, a las once de la mañana se daban cita en la Praza da Constitución una veintena de troteiros dispuestos a hacerse oír. Vamos tomar un chupito de licor café para pasar o frío, aconsejaban los más mayores. Mientras, los jóvenes de la comitiva ensayaban en el parque los mejores movimientos para hacer sonar sus chocas. O mellor e ir correndo e bailar polos pobos, onde a xente nos espera con emoción, confesaba la joven Lorena, ante la mirada atenta de su amiga Ares que, con tan sólo ocho años, ayer se inició en este arte. Estoy bastante nerviosa, confesaba antes de subirse al autobús en dirección a Sarreaus. La primera parada de un itinerario que siguió por Santiago de Calvos, Corvelle, Santa Comba, Ribeiro, Vilameá de Bande y Martiñán.
Décimo aniversario
A permanencia da festa está asegurada cas novas xeracións, coincidían los troteiros de más edad que ayer estaban de aniversario. Hace diez años, el Concello de Bande incentivó la recuperación de una figura típica del Entroido local que se había perdido a raíz de la Guerra Civil. Había varias versiones, así que se estuvo investigando y finalmente se cogió aquellos elementos comunes a todos los trajes, recordaban los presentes. Ayer, después de diez horas de troula, donde no faltó el buen ambiente y la comida tradicional, los troteiros cerraban el día con un baile orquestado desde la charanga Os Bandiños. La siguiente salida, el domingo y el martes del Entroido, coincidiendo con los desfiles de carrozas y comparas.
Celanova se rinde ante las comadres
Un grupo musical y más de trescientas mujeres con ganas de pasarlo bien expandieron ayer la festividad del Entroido en una villa con escasa tradición carnavalera. Celanova celebró con éxito la segunda fiesta de comadres con un animado baile de disfraces en el salón de actos del Claustro Barroco que contó con una resaltable afluencia de hombres vestidos de féminas.
