Hoy vuelve a ser mi día más triste. Hoy mi mente no para de pensar más que nunca en ti. Me siento desolada, rota porque me faltas tú y cada día me haces más falta, ya han pasado dos largos años sin ti, con sus días, minutos y horas, pero mi recuerdo hacia ti sigue vivo y presente en mi vida.
Cuando miro al cielo pienso que estás ahí, tan cerquita y tan lejos, tan presente pero tan inalcanzable. Mi soledad envuelve mi alma y aunque siempre tengo 'a las niñas' a mi alrededor, hoy esa soledad es amiga y compañera en mi tristeza, el llanto por ti permanece cada día, cada vez que voy a nuestra habitación para hablarte, y a veces enfadarme contigo por dejarme aquí sin ti. Cómo me gustaría poder verte una vez más, sólo una. Cuántas cosas tengo que contarte, y aunque sé que estás ahí, que me escuchas, siento rabia de no tenerte, de que no puedas contestarme.
Hoy más que nunca la pena me envuelve. Hoy es el día más triste, el más odioso, porque hoy mi Ditiño, mi gran amor, perdió hace dos años su mayor batalla, la más dura, y me dejó sin su compañía, pero con todo el amor que sentíamos.
Hoy más que nunca la pena me envuelve. Hoy es el día más triste, el más odioso, porque hoy mi Ditiño, mi gran amor, perdió hace dos años su mayor batalla, la más dura, y me dejó sin su compañía, pero con todo el amor que sentíamos.
