El Arenteiro, vigente campeón, y el Polígono, disputan esta tarde desde las siete la final en el campo de O Couto, sin un favorito claro al triunfo
Llegó el día. Esta tarde, desde las siete, Arenteiro y Polígono juegan la final de la Copa Diputación correspondiente a los equipos de Preferente y Primera autonómica.
Ambos estarán arropados en las gradas por un buen número de aficionados. Además, el fútbol ourensano estará ampliamente representado por la mayoría de equipos, en lo que, es sin duda, la fiesta del fútbol provincial.
En el apartado deportivo, los dos equipos llegan con la moral por las nubes, buscando un título, que en los carballiñeses, sería el tercero de su historia. Por contra, para los industriales, sería la primera vez que lo logran.
A las cinco de la tarde parte la expedición del Arenteiro rumbo al campo de O Couto. Y lo hacen además estrenando autocar rotulado para la ocasión. Todos los jugadores están convocados aunque cuatro se perderán la cita por diferentes motivos: Alberto Blanco, operado de menisco, y Marcos Sotelo, con una luxación de clavicula, será por lesión; Aitor Martínez, no puede participar ya que jugó las primeras eliminatorias con el Nogueira, y Dani Dafonte estará ausente por motivos personales.
Eso propicia que el técnico Manel Vázquez tenga que convocar a tres juveniles: Iván Portos, Pol y Cristian, para una lista de 17 jugadores.
En el bando rival, casi el mismo ritual. A las cinco y media parten desde el campo del Polígono en autocar rumbo al Couto. Álex Díaz, lesionado, y Gonzalo, que ya jugó esta competición con el Ourense CF, no podrán participar en el partido. Por lo demás, los 18 restantes se encuentran todos disponibles.
Los técnicos, cautos
Ambos entrenadores, Manel Vázquez y Miguel Sotelo, se muestran cautos sobre el desenlace del partido. El Carballiñés reconoce que "lo afrontaremos con muchas ganas e ilusión pero también sabiendo que nos lo jugamos todo en 90 minutos". Es por ello que piensa que "habrá que tener la cabeza muy fría para estar centrados en el partido y no contagiarnos del ambiente que habrá en las grada". Y reconoce que "lo que más me preocupa es mi equipo, si salimos centrados, estando acertados en la finalización y no cometemos riesgos defensivos, tendremos muchas posibilidades de ganar".
En el banquillo de enfrente, Sotelo no sabe lo que puede suceder: "Normalmente la finales suelen ser feas, esperemos que esta sea distinta". Y avisa que "si nos dejan, vamos a tratar de jugar al fútbol, aunque sabemos que enfrente va estar un gran equipo que seguro que pondrá un ritmo alto y que saldrá a por todas", finalizó.
O Couto. 19,00 horas.
