El CDO será juez al recibir desde las seis de la tarde en el cierre de temporada a una SD Logroñés que necesita puntuar para evitar el descenso directo
La temporada 2013-2014 vive su colofón para el CDO. El Ourense que maravilló con su juego en el arranque de temporada, el que abrazó de nuevo el liderato de Segunda B 12 años después, el que ganó la Copa Federación por segunda vez en la historia del club, el que sufrió lo indecible en una campaña en la que las noticias extradeportivas estuvieron a punto de eclipsar los logros en el terreno de juego, cierra el curso en el estadio de O Couto desde las seis de la tarde ante una Sociedad Deportiva Logroñés que se juega evitar el descenso directo.
Los ourensanistas, con los deberes de la permanencia conseguidos desde hace un par de jornadas, no se juegan nada vital aunque buscarán una victoria que le permita matar tres pájaros de un tiro: el CDO mantendría la octava plaza en la clasificación (los cinco equipos que le preceden en la tabla pueden adelantarle o igualarle, mientras no puede mejorar puesto), mejoraría la puntuación del curso pasado (entonces hizo 47, los mismos que lleva ahora, aunque en dos partidos más), y le serviría para romper una racha de siete jornadas sin conocer la victoria y mejorar los últimos números como local al llevar tres partidos ligueros sin sumar los tres puntos (el 1-0 al Caudal del 16 de marzo supuso el último éxito).
Con el filial jugándose la vida, el técnico José Luis Míguez 'Luisito' convocó a los 12 disponibles del primer equipo así como los canteranos Miguel, Peli, Alex y Dani.
Los riojanos
La SD Logroñés llega a O Couto con la amenaza del descenso directo sobre su espalda. Los riojanos pueden evitarlo, logrando ante el CDO al menos un punto o haciendo lo mismo que su perseguidor, el Caudal Deportivo. Eso sí, haga lo que haga el equipo entrenado por el 'Tato' Abadía no evitará la promoción de permanencia. Seis son las bajas, las de los sancionados Gonzalo, Iñaki Jiménez, Moya y Candelas, así como las de los lesionados Jorge Herreros y Alcántara. El capitán Miguel y Herreros, dos de los tocados, forzaron al máximo la recuperación para estar en el vital partido de esta tarde.
¿Despedida o hasta luego?
Luisito, entrenador del Ourense, es un mar de dudas en cuanto a sentimientos para este partido final. "Teño que darlle mil grazas ós futbolistas porque hoxe -por ayer- foi o último adestramento e traballamos a un nivel altísimo, debo darlle as grazas polo que me aguantaron pero xa non me queda unha gota de ánimo. Non sei se será o último partido co Ourense, porque o futuro non se coñece, pero máis alá da situación deixeime a alma nunha campaña dificilísima que non esquecerei na miña vida", asegura el entrenador ourensanista.
Y un deseo: "O que quero é que esto non se derrumbe, de corazón, joderíame moito por toda a xente que se enganchou ó equipo, penso que en Ourense se volveu a respirar despois de tempo fútbol de verdade. Estouno pasando moi mal porque sentinme só, tiven que tirar dos futbolistas moitas veces e pedinlles un último esforzo para ofrecerlle unha victoria a todos os que nos axudaron este ano".
O Couto, 18,00 horas.
