El Ourense C.F. se reencontró con la victoria en casa al golear al Nogueira por un claro 5-1, aunque los de Luintra ayudaron a ponérselo más fácil
El Ourense C.F. regresó a la senda de los triunfos jugando como local, después de golear al Nogueira por 5-1, en el derbi entre los dos equipos ourensanos.
Aunque el resultado tiene muchos matices, la victoria local fue incontestable. Y eso, para los de Fran Justo, significa volver a encadenar dos victorias consecutivas, algo que hacía mucho tiempo que no lo lograban, y de paso, vuelven a soñar con dar alcance a los tres grandes que pelean por las dos plazas de ascenso directo a Tercera.
Viendo la primera parte muy pocos podían pensar que la victoria de los ourensanos fuese tan fácil como al final le resultó. Y es que el Nogueira comenzó siendo el dominador del juego y el que tuvo las mejores ocasiones.
La más clara fue para Sergi, que antes había rematado por encima del larguero, y que está vez se encontró con Michi, que desbarató con una buena intervención el disparo del delantero de Luintra. Después, un tiro de Víctor Gallego que se fue a córner, un disparo del visitante Esteban y poco más.
Cuando parecía que se llegaba al descanso, una internada de Andersson Cruz, que se fue de tres rivales, acabó en penalti. Martín Lamelas lo transformó y el colegiado ya no dejó sacar de centro.
Minutos fatídicos
Pero lo peor estaba por llegar. Si el primer gol de los de Justo fue en un minuto clave, los dos siguientes mucho más. Y con regalos de los de Ecay incluidos.
En el 47, de nuevo Martín Lamelas, se aprovecha de un fallo defensivo para de tiro raso superar a Borja. Y en el 50, Víctor Gallego de cabeza hizo el tercero. Parecía que el partido estaba sentenciado y casi que fue así.
Lois, con una falta directa puso el 3-1 en el 58 y cierta incertidumbre en el marcador, pero para entonces a los hombres clave del Nogueira se les había acabado la gasolina. Así era imposible.
El partido terminó con dos nuevos goles de Andersson Cruz para saldar un 5-1 que dejó a los ourensanos con un gran sabor de boca.
