El Plasencia quiere luchar por el ascenso cimentándose en jugadores como Barceló, Robles, Blackshear o Santana.
Tenemos un equipo corto pero con calidad. El técnico del Plasencia, Ñete Bohigas, confirma lo que desde fuera intuye cualquier aficionado.
El club placentino convive por primera vez en muchas temporadas con la incómoda sensación de estar por debajo de su eterno rival, el Cáceres. Recuperar su sitio en la LEB Oro es ahora más que nunca la exigencia de una afición que presume de ser una de las más fieles y numerosas de la categoría. Bohigas ha apostado por jugadores contrastados, versátiles y de calidad para intentar competir con los mejores, aunque eso le ha impedido fichar a diez jugadores de nivel. Hacer del Ciudad de Plasencia un fortín será la primera meta: Si queremos luchar con los mejores, tenemos que hacernos fuertes en casa, y todavía más ante rivales que van a estar arriba.
Dos espantadas marcaron la configuración de la plantilla. Para la dirección, el elegido era Luis César Garrido, pero el base optó por jugar en el Cajasur cuando ya había firmado el contrato con el Plasencia. Un joven, Adolfo Santos, y el escolta Fran Robles ocupan el puesto vacante.
En el perímetro, Jhony Barceló lleva el peso de la anotación. El alero iniciará su tercera etapa en Plasencia con el galardón de mejor nacional de la última Liga. Le acompañan Kerry Blackshear, que hace de todo, y Nacho Fort, que aporta centímetros y ayuda muchísimo en el rebote.
Santana, capítulo X
En la zona destaca la presencia de Edward Santana. Los números del dominicano abruman, pero lo cierto es que en su décima temporada en España ya ha militado en diez equipos distintos. Sólo en Los Barrios renovó contrato. Pese a sus peculiaridades, el pívot es clave en cualquier plantilla. Le complementan el cumplidor Conejero, un Dominick Martin que siempre apunta muy alto pero nunca explota y el parche de urgencia Kris Clarkson.
El club placentino convive por primera vez en muchas temporadas con la incómoda sensación de estar por debajo de su eterno rival, el Cáceres. Recuperar su sitio en la LEB Oro es ahora más que nunca la exigencia de una afición que presume de ser una de las más fieles y numerosas de la categoría. Bohigas ha apostado por jugadores contrastados, versátiles y de calidad para intentar competir con los mejores, aunque eso le ha impedido fichar a diez jugadores de nivel. Hacer del Ciudad de Plasencia un fortín será la primera meta: Si queremos luchar con los mejores, tenemos que hacernos fuertes en casa, y todavía más ante rivales que van a estar arriba.
Dos espantadas marcaron la configuración de la plantilla. Para la dirección, el elegido era Luis César Garrido, pero el base optó por jugar en el Cajasur cuando ya había firmado el contrato con el Plasencia. Un joven, Adolfo Santos, y el escolta Fran Robles ocupan el puesto vacante.
En el perímetro, Jhony Barceló lleva el peso de la anotación. El alero iniciará su tercera etapa en Plasencia con el galardón de mejor nacional de la última Liga. Le acompañan Kerry Blackshear, que hace de todo, y Nacho Fort, que aporta centímetros y ayuda muchísimo en el rebote.
Santana, capítulo X
En la zona destaca la presencia de Edward Santana. Los números del dominicano abruman, pero lo cierto es que en su décima temporada en España ya ha militado en diez equipos distintos. Sólo en Los Barrios renovó contrato. Pese a sus peculiaridades, el pívot es clave en cualquier plantilla. Le complementan el cumplidor Conejero, un Dominick Martin que siempre apunta muy alto pero nunca explota y el parche de urgencia Kris Clarkson.
