El triunfo del Ourense CF ante el Victoria mantiene a los de Oira muy vivos, y el Pabellón, que empató ante el Bansander, sigue al límite de la salvación
Cuatro jornadas. Es lo que le falta a la División de honor juvenil para poner el punto y final a una liga en la que el sino para los conjuntos ourensanos es el sufrimiento. Sí, sufrimiento, pero al menos lo pueden contar, sobre todo un Ourense CF que lleva con la soga al cuello desde hace un par de meses pero cual prestidigitador de renombre no solo está aplazando semana a semana su despedida de la categoría si no que además ha logrado aflojar un poco el nudo.
A pesar del triunfo de la pasada semana ante el Victoria (2-0) la empresa todavía está muy difícil, pues los de Oira siguen colistas a cinco puntos del Perines, equipo que en este momento marca la frontera entre permanencia y descenso, pero cada semana que pasa la distancia con el cielo es menor. Además, precisamente el conjunto cántabro es el próximo rival para el equipo de Fran justo. Será la enésima final para el Ourense CF que parece moverse como gato panza arriba en estas situaciones límite. La cita será mañana, a domicilio.
Tres victorias y un empate han sumado los ourensanos en el último mes y medio, un bagaje que le permite seguir soñando.
Sobrevivir a una 'encerrona'
El Pabellón sumó un punto en tierras cántabras ante el Bansander (1-1). Los pabellonistas cobraron ventaja en el marcador pero en el tramo final igualaron los locales, que llevaban seis derrotas consecutivas. Doble palo para los pabellonistas, primero por perder dos puntos vitales al final y segundo por lo vivido durante todo el partido, pues entendieron que les hicieron "una encerrona tremenda. Fue un partido durísimo y lo estábamos sacando bien a base de orgullo, pero el empate fue una putada inmensa. Pero ahora ya está, haremos bueno el punto si ganamos en casa al Lugo".
Los lucenses son los rivales el Viernes Santo (Miguel Ángel, 12,00 horas). Toca recibir con el cuchillo entre los dientes a un equipo que llegó a dominar la categoría aunque en los últimos dos meses no ha logrado aguantar el tirón de los mejores y con cinco derrotas en 10 jornadas se queda en la sexta plaza a 12 puntos del líder: "Es un equipo de calidad aunque en este partido quien se lo juega todo somos nosotros por lo que estamos a salir con la mentalidad a la que estamos obligados porque el partido hay que sacarlo adelante", asegura el técnico Guillermo García, técnico pabellonista, que recupera para esta cita a Pablo y Nespereira, que cumplieron sanción. Rivero ya trabaja con el grupo pero es duda para este encuentro.
