Roberto Valeiro dirige al Bergantiños. Futbolista en el Lugo cuando Fonsi Valverde dirigió a los rojiblancos, cogió el equipo coruñés a raíz de la lesión del primer entrenador, Manolo Bardança, que se rompió el talón de aquiles.
'Por supuesto que nos jugamos muchísimo, necesitamos tres o cuatro puntos más para evitar los arrastres. Es verdad que estamos en el puesto 13, pero sólo le sacamos un punto a nuestros inmediatos perseguidores', Santa Comba y Pontevedra B. 'En ese sentido, podemos decir que llegamos a Ourense aún con la soga al cuello, obligados a sacar algo positivo', relata.
Apenas 28 goles en 33 partidos, sólo por delante del Verín, colista... 'Sí, son muy pocos. Nos cuesta mucho, aunque ha habido partidos en los que hemos fallado muchísimas ocasiones. Son rachas, porque ha habido otros en los que hemos llegado dos veces y hemos metido las dos', remarca.
'Es obvio que es una salida complicada, muy complicada. El Ourense es el gallito de la categoría, uno de los pocos equipos del grupo que puede jugar a lo que quiera, puede hacer fútbol directo, puede hacer fútbol combinativo, puede jugar al contragolpe... Es sin duda la plantilla más compensada. ¿Que no va primero? Quizá porque entró en una mala dinámica que le hizo perder muchos puntos. Pero al final se impone la lógica y va a pelear por el ascenso a Segunda B', subraya Valeiro.
¿Mejor que el Ourense lo tenga todo prácticamente hecho? 'Sobre el papel sí. Porque pueden reservar jugadores tocados, limpiar tarjetas... Mucha tensión seguida provoca fatiga. Aunque nunca se sabe, porque igual los que entren te la lían', responde Roberto Valeiro.
¿Cuál va a ser el planteamiento? 'Teniendo en cuenta que vamos a jugar en un campo grande y ante un rival superior es evidente que vamos a intentar no dejar espacios a nuestra espalda, que vamos a intentar tener las líneas muy juntas y esperar hacer daño en alguna contra. Ahora, eso es la pizarra, y ya se sabe que en la pizarra ganamos todos los entrenadores. Ah, y una cosa muy importante, el rival también juega', recalca el entrenador del Bergantiños.
Hasta hace algunas jornadas todos los entrenadores subrayaban del Ourense el potencial de medio campo hacia delante. Sin embargo, últimamente se centran más en el medio campo hacia atrás, en el tan manido equilibrio para los entrenadores. ¿Y para Valeiro? 'Yo tuve a Fonsi como entrenador en el Lugo hace dos temporadas y es un técnico al que le gusta que su equipo ataque pero también defienda. Le gusta atacar con muchos, pero siempre dejando la espalda bien cubierta. ¿La estrategia? Una parte cada vez más importante, decide muchos partidos trabados. A lo largo de la temporada te da muchos puntos', apunta.
Un par de páginas
'Para enumerar las virtudes del Ourense necesitaríamos un par de páginas. Es un equipo que presiona mucho, que no te deja pensar. Y a la hora de atacar tiene arriba gente muy rápida y muy habilidosa', asegura Valeiro, que no esconde sin embargo que 'a un solo partido las fuerzas se igualan, todo puede cambiar si la primera vez que llegas haces gol'.
Apenas 28 goles en 33 partidos, sólo por delante del Verín, colista... 'Sí, son muy pocos. Nos cuesta mucho, aunque ha habido partidos en los que hemos fallado muchísimas ocasiones. Son rachas, porque ha habido otros en los que hemos llegado dos veces y hemos metido las dos', remarca.
'Es obvio que es una salida complicada, muy complicada. El Ourense es el gallito de la categoría, uno de los pocos equipos del grupo que puede jugar a lo que quiera, puede hacer fútbol directo, puede hacer fútbol combinativo, puede jugar al contragolpe... Es sin duda la plantilla más compensada. ¿Que no va primero? Quizá porque entró en una mala dinámica que le hizo perder muchos puntos. Pero al final se impone la lógica y va a pelear por el ascenso a Segunda B', subraya Valeiro.
¿Mejor que el Ourense lo tenga todo prácticamente hecho? 'Sobre el papel sí. Porque pueden reservar jugadores tocados, limpiar tarjetas... Mucha tensión seguida provoca fatiga. Aunque nunca se sabe, porque igual los que entren te la lían', responde Roberto Valeiro.
¿Cuál va a ser el planteamiento? 'Teniendo en cuenta que vamos a jugar en un campo grande y ante un rival superior es evidente que vamos a intentar no dejar espacios a nuestra espalda, que vamos a intentar tener las líneas muy juntas y esperar hacer daño en alguna contra. Ahora, eso es la pizarra, y ya se sabe que en la pizarra ganamos todos los entrenadores. Ah, y una cosa muy importante, el rival también juega', recalca el entrenador del Bergantiños.
Hasta hace algunas jornadas todos los entrenadores subrayaban del Ourense el potencial de medio campo hacia delante. Sin embargo, últimamente se centran más en el medio campo hacia atrás, en el tan manido equilibrio para los entrenadores. ¿Y para Valeiro? 'Yo tuve a Fonsi como entrenador en el Lugo hace dos temporadas y es un técnico al que le gusta que su equipo ataque pero también defienda. Le gusta atacar con muchos, pero siempre dejando la espalda bien cubierta. ¿La estrategia? Una parte cada vez más importante, decide muchos partidos trabados. A lo largo de la temporada te da muchos puntos', apunta.
Un par de páginas
'Para enumerar las virtudes del Ourense necesitaríamos un par de páginas. Es un equipo que presiona mucho, que no te deja pensar. Y a la hora de atacar tiene arriba gente muy rápida y muy habilidosa', asegura Valeiro, que no esconde sin embargo que 'a un solo partido las fuerzas se igualan, todo puede cambiar si la primera vez que llegas haces gol'.
