Las últimas derrotas han caldeado el ambiente en un club que empezó la temporada con la prudencia como mensaje y que ahora lo olvida pensando en conseguir un objetivo ilusionante pero difícilmente exigible por potencial y por la situación interna que vive una plantilla lastrada por las lesiones.
Pepe Vilachá se muerde la lengua y habla como hombre de club: 'Estemos os que estemos sairemos a competir en cada partido'. El técnico fue honrado y pidió refuerzos cuando el equipo era líder. Todos los equipos de la categoría coincidían en la calidad del Verín pero también en los problemas que tendría con el paso de la jornadas al tener la plantilla más corta de cuantos aspiraban al ascenso. Entonces el mensaje cayó en saco roto y tampoco pareció importante porque el mensaje de un club hundido en todas las parcelas hace sólo unos meses era simplemente ilusionar de nuevo a los aficionados pensando en dar el salto la temporada próxima.
Por los excelentes resultados o por un exceso de optimismo ese mensaje ya no tiene validez. Una parte de la directiva cuestiona la contnuidad de Pepe Vilachá. 'Temos dubidas. Vilachá veu para ascender o equipo e agora estamos moi mal e eso tamén non inflúe para encontrar patrocinadores', asegura el presidente verinense Evaristo Francisco Manso. Otra parte de la directiva sí apoya a Vilachá y la plantilla está con su entrenador.
El trabajo del técnico está sobre la mesa. Sacó petróleo del equipo mientras tuvo a toda la plantilla pero la lesión de Iago primero y el fichaje de Denis por el Ourense después destrozaron al equipo.
El club intentó mover ficha pero mientras rivales directos como el Nigrán ataban a tres jugadores con nivel de Segunda B, el Verín sólo consiguió cerrar el regreso de Diego Soto, que llevaba diez meses sin jugar.
Las intentonas por fichar al delantero Pablo Barreal se quedaron en nada. ¿Fichajes? 'De momento non hai nada', comenta el presidente, Francisco Manso.
La Liga se acaba pero el Verín no mueve ficha para justificar con hechos lo que solicita de palabra y la única medida que parece dispuesta a tomar la directiva es el manido cambio de entrenador. Quizá ni siquiera tenga que dar el paso la directiva.
Por los excelentes resultados o por un exceso de optimismo ese mensaje ya no tiene validez. Una parte de la directiva cuestiona la contnuidad de Pepe Vilachá. 'Temos dubidas. Vilachá veu para ascender o equipo e agora estamos moi mal e eso tamén non inflúe para encontrar patrocinadores', asegura el presidente verinense Evaristo Francisco Manso. Otra parte de la directiva sí apoya a Vilachá y la plantilla está con su entrenador.
El trabajo del técnico está sobre la mesa. Sacó petróleo del equipo mientras tuvo a toda la plantilla pero la lesión de Iago primero y el fichaje de Denis por el Ourense después destrozaron al equipo.
El club intentó mover ficha pero mientras rivales directos como el Nigrán ataban a tres jugadores con nivel de Segunda B, el Verín sólo consiguió cerrar el regreso de Diego Soto, que llevaba diez meses sin jugar.
Las intentonas por fichar al delantero Pablo Barreal se quedaron en nada. ¿Fichajes? 'De momento non hai nada', comenta el presidente, Francisco Manso.
La Liga se acaba pero el Verín no mueve ficha para justificar con hechos lo que solicita de palabra y la única medida que parece dispuesta a tomar la directiva es el manido cambio de entrenador. Quizá ni siquiera tenga que dar el paso la directiva.
