El éxito de la subasta del Tesoro celebrada ayer, la primera tras el parón navideño, y la caída de la prima de riesgo del país, que se situó al final de la jornada en los 332 puntos básicos, muestran una paulatina recuperación de la confianza de los mercados en la economía española.
España reanudaba ayer y las subastas de deuda y captó en su primera emisión del año 5.816 millones de euros, el 4,8 % de sus necesidades de financiación para el año, con una notable bajada del interés, que en algún caso ha sido del 15 %. Esta emisión supone, según el Ministerio de Economía, un 4,8 % de la previsión de emisión para todo el año en instrumentos a medio y largo plazo.
El Ejecutivo valoró el alto volumen adjudicado en la subasta de ayer, que no se registraba desde principios del pasado año; además, la colocación superó en más de 800 euros el importe máximo previsto. El respaldo de los inversores quedaba patente en la fuerte demanda de las entidades, 13.405 millones de euros, con lo que el ratio de cobertura, o proporción entre la demanda y el importe adjudicado, ha sido elevada, de 2,3 veces.
En conjunto, Economía cree que España arranca el año en una posición relativamente confortable en los mercados financieros, reflejo de una mejora de la confianza y la credibilidad de las reformas llevadas a cabo por el Gobierno, como la consolidación fiscal, la reforma financiera y otras reformas estructurales. A ellos responde también, prosigue la misma fuente, la evolución en los mercados secundarios durante las últimas semanas.
PRIMA DE RIESGO
Al término de la emisión de ayer la prima de riesgo de España caía a 346 puntos básicos y al cierre del mercado el diferencial se situó en 334 puntos, 32 menos que al término de la jornada previa y su nivel más bajo desde marzo de 2012.
Durante el pasado año, el diferencial entre el bono español a diez años y el alemán del mismo plazo, que permite medir el riesgo país, osciló entre el mínimo de febrero en 299,8 puntos básicos y el máximo de julio, 638,4.
La rentabilidad del bono español a diez años, cuyo diferencial con el alemán del mismo plazo mide el riesgo país, se ha situado al término de las negociaciones en el 4,871 %. Es la segunda vez en lo que va de año que el rendimiento se coloca por debajo del 5 %, en cotas que no registraba desde marzo de 2012.
España ha estrenado sus emisiones de 2013 con parte de los deberes ya hechos, después de haber captado en 2012 más importe del previsto para hacer frente a las necesidades del ejercicio, que servirán para financiar este año.
En las sucesivas emisiones de deuda de 2012 a distintos plazos captó más de 205.000 millones de euros, aunque, si se tiene en cuenta sólo la deuda a medio y largo plazo, el Tesoro captó 97.057 millones de euros, lo que supone el 113 % de lo presupuestado para 2012.
El Tesoro español necesitará este año una menor financiación que en 2012, dado que emitirá en cifras brutas entre 215.000 y 230.000 millones de euros, con lo que una vez descontadas las amortizaciones de deuda las necesidades de emisión serán de 71.000 millones de euros.
El Ejecutivo valoró el alto volumen adjudicado en la subasta de ayer, que no se registraba desde principios del pasado año; además, la colocación superó en más de 800 euros el importe máximo previsto. El respaldo de los inversores quedaba patente en la fuerte demanda de las entidades, 13.405 millones de euros, con lo que el ratio de cobertura, o proporción entre la demanda y el importe adjudicado, ha sido elevada, de 2,3 veces.
En conjunto, Economía cree que España arranca el año en una posición relativamente confortable en los mercados financieros, reflejo de una mejora de la confianza y la credibilidad de las reformas llevadas a cabo por el Gobierno, como la consolidación fiscal, la reforma financiera y otras reformas estructurales. A ellos responde también, prosigue la misma fuente, la evolución en los mercados secundarios durante las últimas semanas.
PRIMA DE RIESGO
Al término de la emisión de ayer la prima de riesgo de España caía a 346 puntos básicos y al cierre del mercado el diferencial se situó en 334 puntos, 32 menos que al término de la jornada previa y su nivel más bajo desde marzo de 2012.
Durante el pasado año, el diferencial entre el bono español a diez años y el alemán del mismo plazo, que permite medir el riesgo país, osciló entre el mínimo de febrero en 299,8 puntos básicos y el máximo de julio, 638,4.
La rentabilidad del bono español a diez años, cuyo diferencial con el alemán del mismo plazo mide el riesgo país, se ha situado al término de las negociaciones en el 4,871 %. Es la segunda vez en lo que va de año que el rendimiento se coloca por debajo del 5 %, en cotas que no registraba desde marzo de 2012.
España ha estrenado sus emisiones de 2013 con parte de los deberes ya hechos, después de haber captado en 2012 más importe del previsto para hacer frente a las necesidades del ejercicio, que servirán para financiar este año.
En las sucesivas emisiones de deuda de 2012 a distintos plazos captó más de 205.000 millones de euros, aunque, si se tiene en cuenta sólo la deuda a medio y largo plazo, el Tesoro captó 97.057 millones de euros, lo que supone el 113 % de lo presupuestado para 2012.
El Tesoro español necesitará este año una menor financiación que en 2012, dado que emitirá en cifras brutas entre 215.000 y 230.000 millones de euros, con lo que una vez descontadas las amortizaciones de deuda las necesidades de emisión serán de 71.000 millones de euros.
