El PP escenificó ayer su unidad en torno a Mariano Rajoy en la primera jornada del 17 Congreso nacional y mientras perfiló las incorporaciones a la que será su nueva dirección. Un congreso con nombre propio: María Dolores y donde en el ánimo de los casi 5.000 asistentes se podía palpar la relajación, pues a diferencia del congreso de hace cuatro años, en Valencia, donde a cada conflicto le sucedía otro quizá más sonoro, éste se está caracterizando por la concordia.
El Partido de ahora es una formación pendiente de la acción de Gobierno, como reconocen sus dirigentes, de forma que en Génova perviven muy pocas incógnitas sobre cuál será la dirección que asome de este congreso.
El PP desveló que su deuda actual asciende a 54 millones de euros -49 corresponden a hipotecas- y aprobó también las ponencias redactadas para ser debatidas por los compromisarios.
En la ponencia política que se aprobó, el PP empeña su compromiso en la defensa del Estado de Derecho ante el menoscabo que considera que sufrió en los últimos años. Algo que cree que se tradujo en falta de respeto a algunas garantías jurisdiccionales básicas como la presunción de inocencia, el secreto de sumario, el derecho al honor o el derecho a la defensa.
APOYO A COSPEDAL
Por otra parte, la secretaria general, María Dolores de Cospedal, aseguró que no tiene constancia de que se produjeran'presiones' por parte de los 'barones' de su partido contra una posible 'acumulación de poder' en torno a ella y los que la rodean. Sobre el congreso en sí, afirmó que será 'muy diferente' al celebrado hace unas dos semanas por los socialistas, 'nosotros no tenemos que simular o aparentar unidad'poniendo en valor la 'unidad y fortaleza' de su formación. Y, es que el PP escenificó ayer su unidad en torno a Mariano Rajoy en la primera jornada del Congreso .
La que seguirá como secretaria general, Cospedal, defendió la labor reformista del Gobierno y aseguró que en los oídos de todos los representantes del partido resuena más la 'marea silenciosa' que representan los cinco millones de parados que 'las pancartas y las posturas ancladas en el pasado'. María Dolores de Cospedal también quiso dejar claro que el PP no hará ningún guiño a ETA y la banda no tendrá compensaciones por abandonar la violencia. Ese mensaje lo resumió la secretaria general, quien al presentar su informe de gestión, garantizó que el PP siempre negará cualquier posibilidad de justificación de la actuación etarra.
El turno para escuchar a Rajoy será hoy, antes de la votación en la que será reelegido presidente, y ayer se limitó a hacer unas declaraciones a los periodistas en las que se mostró convencido de la victoria de Javier Arenas en las próximas elecciones andaluzas.
La jornada de ayer también sirvió para rendir homenaje al presidente fundador del partido, Manuel Fraga, inaugurando una exposición sobre el político gallego y con repetidas referencias a él en los discursos.
El PP desveló que su deuda actual asciende a 54 millones de euros -49 corresponden a hipotecas- y aprobó también las ponencias redactadas para ser debatidas por los compromisarios.
En la ponencia política que se aprobó, el PP empeña su compromiso en la defensa del Estado de Derecho ante el menoscabo que considera que sufrió en los últimos años. Algo que cree que se tradujo en falta de respeto a algunas garantías jurisdiccionales básicas como la presunción de inocencia, el secreto de sumario, el derecho al honor o el derecho a la defensa.
APOYO A COSPEDAL
Por otra parte, la secretaria general, María Dolores de Cospedal, aseguró que no tiene constancia de que se produjeran'presiones' por parte de los 'barones' de su partido contra una posible 'acumulación de poder' en torno a ella y los que la rodean. Sobre el congreso en sí, afirmó que será 'muy diferente' al celebrado hace unas dos semanas por los socialistas, 'nosotros no tenemos que simular o aparentar unidad'poniendo en valor la 'unidad y fortaleza' de su formación. Y, es que el PP escenificó ayer su unidad en torno a Mariano Rajoy en la primera jornada del Congreso .
La que seguirá como secretaria general, Cospedal, defendió la labor reformista del Gobierno y aseguró que en los oídos de todos los representantes del partido resuena más la 'marea silenciosa' que representan los cinco millones de parados que 'las pancartas y las posturas ancladas en el pasado'. María Dolores de Cospedal también quiso dejar claro que el PP no hará ningún guiño a ETA y la banda no tendrá compensaciones por abandonar la violencia. Ese mensaje lo resumió la secretaria general, quien al presentar su informe de gestión, garantizó que el PP siempre negará cualquier posibilidad de justificación de la actuación etarra.
El turno para escuchar a Rajoy será hoy, antes de la votación en la que será reelegido presidente, y ayer se limitó a hacer unas declaraciones a los periodistas en las que se mostró convencido de la victoria de Javier Arenas en las próximas elecciones andaluzas.
La jornada de ayer también sirvió para rendir homenaje al presidente fundador del partido, Manuel Fraga, inaugurando una exposición sobre el político gallego y con repetidas referencias a él en los discursos.
