La novia del joven degollado en un apartamento del complejo de viviendas Pullman en Cala Major, Verónica D.M., de 26 años, seguía ayer en las dependencias de la Jefatura Superior de Policía de Palma donde fue interrogada, según han informado fuentes de la Policía Nacional. De forma que no será hasta hoy cuando podría pasar a disposición judicial.
La mujer fue arrestada el domingo por estar presuntamente involucrada en la muerte de su compañero sentimental, Francisco C.A, de 25 años, quien fue hallado muerto en el interior del apartamento en el que convivía con la detenida. Según la versión de ésta, se encontraba el sábado por la tarde en la zona de la piscina de los apartamentos y al subir a la vivienda encontró a su pareja degollada, tras lo cual dio la voz de alarma pidiendo auxilio a los vecinos.
SOSPECHAS
Sin embargo, el Grupo de Homicidios del Cuerpo Nacional de Policía, después de efectuar la inspección del apartamento y realizar algunas comprobaciones, albergó sospechas sobre la posible implicación de la mujer en la muerte de Francisco y procedió a detenerla. La pareja convivía en el apartamento desde hacía más de un año y según la versión de los vecinos eran frecuentes las discusiones.
Aunque el Grupo de Homicidios de la Policía no descarta otras hipótesis, los primeros indicios apuntan a que Verónica habría causado la muerte de su pareja y tras permanecer un rato en la zona de la piscina habría dado la voz de alarma desde el balcón para disimular su implicación en el homicidio, extremo que investigan los agentes encargados de la investigación. Cuando la ambulancia llegó hasta la vivienda Francisco C.A. ya había muerto desangrado a consecuencia del degüelle practicado con una herramienta punzante.
SOSPECHAS
Sin embargo, el Grupo de Homicidios del Cuerpo Nacional de Policía, después de efectuar la inspección del apartamento y realizar algunas comprobaciones, albergó sospechas sobre la posible implicación de la mujer en la muerte de Francisco y procedió a detenerla. La pareja convivía en el apartamento desde hacía más de un año y según la versión de los vecinos eran frecuentes las discusiones.
Aunque el Grupo de Homicidios de la Policía no descarta otras hipótesis, los primeros indicios apuntan a que Verónica habría causado la muerte de su pareja y tras permanecer un rato en la zona de la piscina habría dado la voz de alarma desde el balcón para disimular su implicación en el homicidio, extremo que investigan los agentes encargados de la investigación. Cuando la ambulancia llegó hasta la vivienda Francisco C.A. ya había muerto desangrado a consecuencia del degüelle practicado con una herramienta punzante.
