La participación no llegará al 10% y sólo 6.350 ourensanos de los más de 80.000 inscritos en el CERA podrán votar

La emigración comienza a votar en urna con una abstención histórica

Una emigrante vota en la urna colocada en la embajada española de Montevideo (Foto: IVÁN FRANCO)
Las elecciones generales del 20 de noviembre ya tienen como primer legado que serán las que registren una mayor abstención de los españoles residentes en el extranjero, superior al 90 por ciento. A pesar de que el número de inscritos en el Censo Electoral de Residentes Ausentes (CERA) ha aumentado hasta situarse en 1.463.473 personas -258.144 más que en 2008-, solo uno de cada diez ha solicitado votar. En el caso de los emigrantes ourensanos, fueron aceptadas 6.350 solicitudes de voto y denegadas 2.439 de los más de 80.000 emigrantes que la provincia tiene inscritos en el CERA
De este porcentaje, no todos acabarán ejerciendo el sufragio, puesto que se han denunciado numerosas quejas de electores a los que la documentación no les está llegando a tiempo desde España para poder mandar las papeletas a los consulados antes del día 19.

La crisis del voto emigrante tiene su principal causa en el cambio de la ley electoral aprobada el pasado mes de enero, que se ha unido al tradicional problema de la correspondencia.

Además de suprimir la participación de los expatriados en los comicios municipales, la reforma legal instauró el llamado voto rogado para las generales y autonómicas. Esta fórmula obliga a quienes viven en el extranjero a comunicar personalmente su voluntad de ejercer su derecho de sufragio.
Ya en las autonómicas de mayo, votó menos del cinco por ciento de los inscritos en el CERA, después de que lo pidiera el 8,2 por ciento.
En 2008, el índice de participación del CERA fue del 31,74 por ciento, no lejos del récord de 1989, cuando se registró un 36,15.

En Europa
Los emigrantes en Europa comenzaron a votar ayer en los consulados de sus respectivos países, en un ambiente de 'total normalidad' y sin incidentes destacables, salvo algún retraso en la recepción de las papeletas.
Hasta el próximo viernes, podrán ejercer su derecho al voto los españoles residentes en el exterior que así lo han solicitado.

En Suiza, las votaciones comenzaron en las urnas instaladas en los consulados de Berna, Zúrich y Ginebra. Fuentes diplomáticas dijeron que lo previsible es que sólo vote un 10 por ciento entre los algo más de 70.000 españoles con derecho a voto.

En Francia, los 170.213 españoles en edad para votar pueden hacerlo en las urnas instaladas en los consulados generales de París, Marsella, Estrasburgo, Burdeos, Lyon, Toulouse, Bayona, Pau, Perpiñán y Montpellier.
La jornada de votación en Londres avanzaba bien y sin incidencias ya que los españoles residentes 'están acostumbrados a los procesos electorales', indicó el vicecónsul, Miguel Oliveros. En el Reino Unido hay 46.132 españoles residentes con derecho a voto, y aunque este año se ha facilitado el voto por correo, muchas personas prefieren hacerlo en persona, 'por cuestión de hábito -puntualizó Oliveros- o por asegurarse que queda bien depositado'.

El retraso en la llegada de papeletas a los domicilios de los votantes 'es el caballo de batalla de estas elecciones' que, según el encargado de Asuntos Consulares de la embajada de España en Berlín, Rafael Chaves, se debe al cambio de sistema.

El diplomático confirmó que el Ministerio de Asuntos Exteriores ha habilitado con la Oficina del Censo Electoral una ampliación para depositar el voto hasta el día 19 inclusive. 'Estamos intentando que el derecho al voto se ejerza con todas las garantías' y que los ciudadanos españoles puedan ejercer su derecho constitucional', subrayó Chaves, quien agregó que, por lo demás, esta primera jornada electoral está transcurriendo con 'absoluta normalidad'.

Por otra parte, fuentes de la embajada señalaron que al tratarse de la primera vez que los ciudadanos españoles en el extranjero pueden depositar el voto en urnas instaladas en las representaciones diplomáticas, no prevén nada en cuanto a la participación, aunque aseguran que 'hay llamadas y muchísimo interés'.

Unas 5.000 personas participarán en las elecciones generales de este domingo desde Bélgica, según los cálculos del Consulado General de España en Bruselas, gracias al voto por correo o depositando su papeleta en unas urnas habilitadas en la oficina consular.

Ayer votaron cerca de 1.400 electores, de los que entre 260 y 270 se han acercado a depositar su papeleta directamente en la urna, mientras que unos 1.100 han remitido su sobre al Consulado español en la capital de la Unión Europea. 'A este ritmo, calculamos que unos 5.000 ciudadanos habrán votado al cierre del plazo' según aseguraron fuentes de la Embajada española en Bélgica.

Unas 300 personas votaron hasta este mediodía en el Consulado de España en Roma sin que se registraran incidentes, informó a Efe el cónsul español, Eduardo de Laiglesia. Además de civiles, muchos religiosos han ejercido su derecho al voto.

En América
Los españoles residentes en Argentina comenzaron a votar en los cinco consulados habilitados en el país, aunque, según cálculos oficiales, apenas el 7 por ciento del censo pretende ejercer su derecho al voto.
En el consulado de la capital, donde viven 235.000 de los 322.000 españoles residentes en Argentina habilitados para votar, las autoridades se mostraron optimistas por la afluencia de electores.

'Desde que abrimos ha habido una cola considerable, y hay una participación importante dentro de lo que esperábamos', dijo el cónsul general de España en Argentina, Pablo Barrios, quien admitió, no obstante, que sólo han realizado los trámites para votar unas 23.100 personas (20.000 residentes en Buenos Aires), poco más del 7 por ciento de los habilitados en el censo.

La participación de los españoles que residen en Venezuela en las elecciones es escasa tras la primera jornada en la que podían acudir al Consulado en Caracas para depositar el voto. El cónsul general en Venezuela, Aníbal Jiménez, dijo que según datos registrados en España se espera que 1.500 personas concurran a la urna habilitada en Caracas después de que fueran descartados por diversos errores de forma el resto de las 2.200 solicitudes de voto rogado emitidas por la comunidad española, que asciende a 145.000 personas en Venezuela.

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