Una testigo dice que el padre del bebé no intuía que su mujer estaba tan mal

Una vecina y empleada del comercio propiedad del padre del bebé que fue hallado muerto dentro de un bolso junto a su madre, de 25 años y nacionalidad china, en la localidad grancanaria de Carrizal de Ingenio, ha dicho hoy a Efe que el marido no sabía que su 'mujer estaba tan mal'.

Dolores Vega ha señalado que todo el pueblo está conmocionado con el suceso, desde que ayer, sobre las 19.00 horas, se hallara muerto al bebé de 15 días después de participar en su búsqueda, tras alertar horas antes el padre, también de nacionalidad china, de la desaparición de ambos del domicilio y de que temía por ambos porque la mujer tenía una depresión posparto.

Tanto a ella como a su hija, Sheila Jordán, que también es empleada del comercio del padre del bebé, les avisaron de que no fueran a trabajar, por lo que decidieron participar en la búsqueda.

Aseguran que el 'pueblo entero se volcó' hasta que horas después fueron hallados, la madre y el bebé, por unos vecinos en un invernadero abandonado, una calle más abajo del domicilio familiar, ha explicado Vega.

Según Vega, la madre del bebé, a la que vio cuando fue detenida por la Guardia Civil, 'no se daba cuenta de nada' y hasta que se la llevaron los guardias civiles estuvo con su marido, quien la abrazó y permaneció junto a ella en todo momento, al tiempo que ha asegurado que está 'destrozado'.

La hija de Vega, Sheila Jordán, de 18 años, ha manifestado que no se explica 'cómo lo pudo hacer', pues tanto la madre del bebe como su marido eran una familia normal, sociable y muy querida en el pueblo, donde llevaban viviendo desde hacía cuatro años.

Otra vecina, Ana Ortiz, que aún desconocía el suceso a primeras horas de esta mañana, no se lo podía creer, pues ha afirmado que la madre del bebé estaba contenta de estar de nuevo embarazada.

El matrimonio, según los vecinos, tiene otro hijo de unos dos años, que está desde hace unos meses en China con sus abuelos e iba a regresar con sus padres en breve.

Ortiz también ha destacado que la detenida era agradable y sociable, pues cuando iba a comprar a la tienda hablaba con ella, aunque no la ve desde que dio a luz.

El bebé, que presentaba signos de violencia, se encontró en un invernadero abandonado dentro de un bolso junto a su madre, que ha sido detenida en relación con su fallecimiento, según ha informado la Policía Local de Ingenio.

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