En torno a 6.000 personas han participado este jueves en las dos manifestaciones convocadas en la ciudad de Ourense en contra de la reforma laboral por los sindicatos CC.OO. y UGT y por su parte la CIG. Ambas protestas partieron con una hora de diferencia del Pabellón de Os Remedios y finalizaron en la Subdelegación del Gobierno de la capital de As Burgas.
La primera manifestación fue la de la CIG, que salió con media hora de retraso del Pabellón municipal y sobre las 13.00 horas, partía la protesta convocada por CC.OO. y UGT, por lo que ambos se situaron finalmente a unos metros de diferencia.
Los comercios, locales de hostelería y entidades bancarias que se encontraban situados en las calles por donde pasaban las manifestaciones cerraron sus puertas para evitar la presión sindical, aunque muchos de ellos volvieron a abrirlas en el momento en que se despejaron las calles.
Los responsables de las tres centrales sindicales convocantes calificaron de 'completo éxito' la jornada de huelga, que 'incluso superó las expectativas previstas', ya que 'prácticamente la actividad empresarial se paralizó' en los principales polígonos industriales de Ourense(San Cibrao das Viñas, Pereiro de Aguiar y Barreiros), al igual que el parque empresarial de Monterrey.
En este sentido, se mostraron 'muy satisfechos' del grado de participación tanto en la jornada de huelga como en las propias manifestaciones, que serán 'la madre de todas las manifestaciones convocadas en Ourense' y exigieron que el Gobierno 'tome nota de ello'.
PARO 'EJEMPLAR'
El responsable de la CIG en Ourense, Etelvino Blanco, ha señalado que 'lo que había en los polígonos' eran 'piquetes informativos de las tres centrales sindicales' y 'y mucha Guardia Civil' y 'no había movimiento', por lo que ha calificado el paro de 'ejemplar y realmente impresionante'.
En la misma línea se ha pronunciado el responsable de UGT, José Luis Fernández Célis, quien ha indicado que 'hay una coincidencia' en 'rechazar la reforma laboral y la política económica' en los participantes en la manifestación, 'independientemente de su color político y su ideología'.
Célis ha explicado que espera que el Gobierno 'tome nota' y 'aproveche el trámite parlamentario de la reforma' para 'corregir', además de 'atenerse al diálogo'. 'Para salir de esta situación necesitamos consenso y no imposición', ha proclamado.
Por su parte, la responsable de CC.OO, Ana Barrios, ha afirmado que la huelga general 'es todo un éxito' y 'sólo hay que ver todos los trabajadores que están secundado este paro'. De hecho, apuntó que los polígonos industriales estaban 'parados' y 'lo mismo ocurrió en la ciudad', por lo que el Gobierno 'tiene que tomar nota de este clamor que hay en la calle'.
CAPITAL
Los sindicatos han asegurado que el paro fue 'total', salvo los servicios mínimos pactados, en el servicio de recogida de basura de la capital de As Burgas y en el servicio de autobuses 'sólo se respetaron los servicios mínimos', aunque 'fueron excesivos en el transporte escolar marcados por la Xunta'.
En el sector de panaderías, el paro también fue 'generalizado', excepto en 'algún pequeño establecimiento' y en el sector de la banca 'los trabajadores respondieron al paro de forma unánime'.
Asimismo, los sindicatos afirmaron que el comercio del centro de la capital de As Burgas 'estuvo paralizado todo' incluso 'en el centro comercial Pontevella'. En la hostelería el paro 'también fue de una gran magnitud en la ciudad', por lo que afirmaron que se quedaron 'cortos' a la hora de 'valorar' cuál 'iba a ser la respuesta ciudadana'.
PEQUEÑOS INCIDENTES
Los piquetes informativos ejercieron presión sobre instituciones, establecimientos hosteleros y comercios de la ciudad de Ourense para que cerrasen sus puertas y secundasen la huelga general. Algunos de sus miembros, que iban encapuchados, llegaron a tirar mesas, sillas y la comida al suelo.
En concreto, los propietarios de dos cafeterías de la ciudad de As Burgas calificaron de 'escándalo tremendo' lo sucedido esta mañana en sus establecimientos, donde 'tiraron pis y aguarrás' sobre los 'pinchos' y 'tiraron todas las tarrinas de los helados'.
Los comercios, locales de hostelería y entidades bancarias que se encontraban situados en las calles por donde pasaban las manifestaciones cerraron sus puertas para evitar la presión sindical, aunque muchos de ellos volvieron a abrirlas en el momento en que se despejaron las calles.
Los responsables de las tres centrales sindicales convocantes calificaron de 'completo éxito' la jornada de huelga, que 'incluso superó las expectativas previstas', ya que 'prácticamente la actividad empresarial se paralizó' en los principales polígonos industriales de Ourense(San Cibrao das Viñas, Pereiro de Aguiar y Barreiros), al igual que el parque empresarial de Monterrey.
En este sentido, se mostraron 'muy satisfechos' del grado de participación tanto en la jornada de huelga como en las propias manifestaciones, que serán 'la madre de todas las manifestaciones convocadas en Ourense' y exigieron que el Gobierno 'tome nota de ello'.
PARO 'EJEMPLAR'
El responsable de la CIG en Ourense, Etelvino Blanco, ha señalado que 'lo que había en los polígonos' eran 'piquetes informativos de las tres centrales sindicales' y 'y mucha Guardia Civil' y 'no había movimiento', por lo que ha calificado el paro de 'ejemplar y realmente impresionante'.
En la misma línea se ha pronunciado el responsable de UGT, José Luis Fernández Célis, quien ha indicado que 'hay una coincidencia' en 'rechazar la reforma laboral y la política económica' en los participantes en la manifestación, 'independientemente de su color político y su ideología'.
Célis ha explicado que espera que el Gobierno 'tome nota' y 'aproveche el trámite parlamentario de la reforma' para 'corregir', además de 'atenerse al diálogo'. 'Para salir de esta situación necesitamos consenso y no imposición', ha proclamado.
Por su parte, la responsable de CC.OO, Ana Barrios, ha afirmado que la huelga general 'es todo un éxito' y 'sólo hay que ver todos los trabajadores que están secundado este paro'. De hecho, apuntó que los polígonos industriales estaban 'parados' y 'lo mismo ocurrió en la ciudad', por lo que el Gobierno 'tiene que tomar nota de este clamor que hay en la calle'.
CAPITAL
Los sindicatos han asegurado que el paro fue 'total', salvo los servicios mínimos pactados, en el servicio de recogida de basura de la capital de As Burgas y en el servicio de autobuses 'sólo se respetaron los servicios mínimos', aunque 'fueron excesivos en el transporte escolar marcados por la Xunta'.
En el sector de panaderías, el paro también fue 'generalizado', excepto en 'algún pequeño establecimiento' y en el sector de la banca 'los trabajadores respondieron al paro de forma unánime'.
Asimismo, los sindicatos afirmaron que el comercio del centro de la capital de As Burgas 'estuvo paralizado todo' incluso 'en el centro comercial Pontevella'. En la hostelería el paro 'también fue de una gran magnitud en la ciudad', por lo que afirmaron que se quedaron 'cortos' a la hora de 'valorar' cuál 'iba a ser la respuesta ciudadana'.
PEQUEÑOS INCIDENTES
Los piquetes informativos ejercieron presión sobre instituciones, establecimientos hosteleros y comercios de la ciudad de Ourense para que cerrasen sus puertas y secundasen la huelga general. Algunos de sus miembros, que iban encapuchados, llegaron a tirar mesas, sillas y la comida al suelo.
En concreto, los propietarios de dos cafeterías de la ciudad de As Burgas calificaron de 'escándalo tremendo' lo sucedido esta mañana en sus establecimientos, donde 'tiraron pis y aguarrás' sobre los 'pinchos' y 'tiraron todas las tarrinas de los helados'.
