La Clio Raid llegó a Marruecos y los participantes pasaron de los 17 grados a pisar la nieve
En la jornada de ayer, los participantes ourensanos de la Clio Raid, David Ferrer y Luis Aragonés, comenzaban el día bien temprano cruzando el Estrecho en ferri hasta la localidad marroquí de Tánger. Una vez allí daba comienzo la primera etapa africana del raid con casi 600 kilómetros de recorrido hasta el Atlas.
"Hemos hecho los 600 kilómetros más duros del raid y han sido por autopista, pero es que nos hemos encontrado desde mujeres y niños vendiendo naranjas en la cuneta hasta guardias haciendo autostop de uniforme, pasando por niños corriendo y aplaudiendo a nuestro paso, un camión descargando y cruzando vigas de un lado a otro de la autopista...", comentaba David Ferrer entre risas.
Luis Aragonés, en un tono más serio, apuntaba: "Esta mañana hemos embarcado temprano, sobre las siete, y hemos llegado a Tánger a las diez para luego hacer 400 kilómetros de autopista y otros 200 de carretera secundaria, que ha sido la subida a los montes del Atlas. En total hemos tardado diez horas más el barco".
Durante la jornada subieron hasta los 1.700 metros, donde encontraron nieve, aunque menos que el año pasado. "Se notaba el cambio de temperatura respecto a los 17 grados de esta mañana cuando bajamos del barco. Ahora nos toca descansar en el campamento que nos tiene previsto la organización a unos 1.400 metros de altitud, así que nos tendremos que abrigar bien", dijo Ferrer.
Hoy tendrán casi 300 kilómetros de etapa desde las ocho de la mañana, y tienen previsto llegar sobre las 15:30. "Jornada ya de desierto africano, donde seguro que algunos podremos tener los primeros problemas de navegación o errores a la hora de elegir el camino a seguir", dijo Aragonés, quien a continuación, entre risas, añadió: "Esperemos que no seamos nosotros".
