Los trabajos de mejora de la Residencia do Maior de Carballiño, que incluye nuevas instalaciones para personas dependientes, obligará en el plazo de un mes al traslado de los 40 internos al centro geriátrico de Cabeza de Vaca. El proyecto fue promovido por la anterior Vicepresidencia de la Xunta y supone una inversión de cuatro millones de euros.
El centro geriátrico Nosa Señora dos Milagros, ubicado en la localidad de Cabeza de Vaca (Barbadás), acogerá en el plazo de un mes a las 40 personas que actualmente están internadas en la Residencia do Maior de Carballiño, debido al inicio de los trabajos de reforma del edificio construido en terrenos del monte comunal de Veiga. Fuentes del departamento de Benestar de la Xunta confirmaron el traslado de los residentes, todos válidos y que habitan el inmueble en régimen de pensión completa.
Las obras están enmarcadas en el proyecto iniciado por la anterior Vicepresidencia de la Xunta, con un presupuesto superior a los cuatro millones de euros, y contemplan la puesta a punto de medidas de seguridad, tales como la detección de incendios, la adaptación de aseos y la ampliación de las puertas de los dormitorios. También se acometerá la reparación de los tejados del edificio y los falsos techos de escayola para evitar la filtración de agua de lluvia, y se efectuará una redistribución de las habitaciones, con el fin de abrirlas al exterior.
Proyecto
Según indicaron las mismas fuentes, aínda que estaba a alternativa de realoxar ós residentes na Residencia de Tempo Libre do Carballiño (130 prazas) e co obxectivo de non interferir na súa programación anual de estancias, finalmente escolleuse o centro de Cabeza de Vaca xa que ten un anexo que na actualidade está sen ocupar. El proyecto impulsado para Carballiño por el departamento de Anxo Quintana y asumido por la actual Consellería de Traballo e Benestar también contempla la construcción de una residencia para personas dependientes, con un total de 80 plazas y tres alturas de edificación, que ya se encuentran en una fase bastante avanzada.
Las previsiones del departamento autonómico apuntan a que las obras de acondicionamiento de la antigua residencia y de la nueva construcción estén finalizadas en el próximo verano.
La creación del centro para dependientes supondrá una oferta de un centenar de puestos de trabajo, que serán objeto de una próxima convocatoria pública. Entre los trabajadores que se precisan destacan plazas de médico, auxiliares de clínica y personal con experiencia en la ayuda a personas con problemas de minusvalía.
Las obras están enmarcadas en el proyecto iniciado por la anterior Vicepresidencia de la Xunta, con un presupuesto superior a los cuatro millones de euros, y contemplan la puesta a punto de medidas de seguridad, tales como la detección de incendios, la adaptación de aseos y la ampliación de las puertas de los dormitorios. También se acometerá la reparación de los tejados del edificio y los falsos techos de escayola para evitar la filtración de agua de lluvia, y se efectuará una redistribución de las habitaciones, con el fin de abrirlas al exterior.
Proyecto
Según indicaron las mismas fuentes, aínda que estaba a alternativa de realoxar ós residentes na Residencia de Tempo Libre do Carballiño (130 prazas) e co obxectivo de non interferir na súa programación anual de estancias, finalmente escolleuse o centro de Cabeza de Vaca xa que ten un anexo que na actualidade está sen ocupar. El proyecto impulsado para Carballiño por el departamento de Anxo Quintana y asumido por la actual Consellería de Traballo e Benestar también contempla la construcción de una residencia para personas dependientes, con un total de 80 plazas y tres alturas de edificación, que ya se encuentran en una fase bastante avanzada.
Las previsiones del departamento autonómico apuntan a que las obras de acondicionamiento de la antigua residencia y de la nueva construcción estén finalizadas en el próximo verano.
La creación del centro para dependientes supondrá una oferta de un centenar de puestos de trabajo, que serán objeto de una próxima convocatoria pública. Entre los trabajadores que se precisan destacan plazas de médico, auxiliares de clínica y personal con experiencia en la ayuda a personas con problemas de minusvalía.
