El campo de fútbol de Espiñedo acogerá la verbena piloto en Ourense

La prueba piloto acogerá un máximo de 1.000 personas. Los formularios, de tipo online, estarán disponibles en los próximos días

El estadio de Espiñedo de Carballiño acogerá la prueba piloto para la reactivación de las verbenas. La Xunta fijó para el 19 de junio el dispositivo, que también se llevará a cabo en Arteixo, Noia, Marín, Tomiño y Mondoñedo. La orquesta Cinema será la encargada de la actuación musical en el estadio del Arenteiro, que acogerá un máximo de 1.000 personas. Los Satélites, Costa Dorada, Marbella, Ocaband y Principal completan el listado de  grupos elegidos por la administración autonómica para realizar la prueba. 

Las seis verbenas se llevarán a cabo en espacios al aire libre acotados, a los que solo podrá acudir el público que se haya inscrito previamente. Los formularios, de tipo online, estarán disponibles en los próximos días en una página web específica. 

No alcohol

Los participantes deberán usar mascarilla durante la verbena y no podrán consumir bebidas alcohólicas, ni tampoco fumar, dentro del recinto. Un equipo de seguridad controlará en todo momento el cumplimiento de todas las medidas sanitarias preventivas, desde el uso de tapabocas al mantenimiento de la correcta distancia de seguridad entre el público.

En el caso de la prueba de Carballiño, también habrá una zona de atracciones de feria y otra de bar con terraza, ambas separadas del recinto propio del concierto, para simular una verbena real. El grupo de gobierno municipal argumenta la elección del espacio, el campo de Espiñedo, por considerarse “o lugar máis axeitado para levar a cabo esta experiencia”. 

Año y medio

La irrupción del coronavirus supuso la paralización total del sector del espectáculo en la comunidad gallega. El verano pasado, pese a que el gobierno autonómico permitía la realización de verbenas, muy pocos municipios acogieron festividades de este tipo. En la provincia, pueblos como León (Vilamarín) y Parada de Amoeiro (Amoeiro) dieron un paso adelante y se atrevieron a organizarlas, pero bajo estrictas medidas sanitarias y no sin preocupación. Este año, la Xunta quiso impulsar dispositivos piloto para que la vuelta del sector sea lo más segura posible.

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