La Concejalía de Medio Ambiente de Carballiño ha encargado un informe a la empresa Aquagest, concesionaria de los servicios de abastecimiento de agua para el consumo y del saneamiento de residuales, al detectar durante estos primeros días de pruebas de la nueva estación depuradora del río Carrás que han quedado sin conexión con la red principal un total de 14 acometidas.
El concejal responsable de este departamento municipal, Bernardo García, se mostró sorprendido ante esta carencia, 'tendo en conta que neste proxecto invertíronse nove millóns de euros e non se entende que non se contemplaran todas as acometidas'. Al respecto, matizaba que de esta forma la depuradora está funcionando con un rendimiento bastante menor del que se preveía.
El entorno más afectado es el de las calles Solana, San Benito y A Saleta, entre otras. Al no ser completada la obra de conexión con la red general, las viviendas y demás establecimientos de este entorno siguen vertiendo sus aguas residuales directamente al río Carrás. Un contrasentido, si se tiene en cuenta la inversión millonaria realizada precisamente para acabar con la contaminación de sus aguas, que recogían hasta el inicio de las pruebas la mitad de las residuales de Carballiño, de algunos pueblos de los alrededores y también las procedentes del polígono industrial y parque empresarial.
El informe que redactará Aquagest reflejará el número de inmuebles que todavía vierten directamente al río y su repercusión en el rendimiento de la depuradora.
Bernardo García declaró que el informe será remitido a Augas de Galicia, acompañado de la correspondiente solicitud para que se haga cargo de la financiación de las obras necesarias, 'porque o Concello non pode asumir o seu alto coste', aseguró el concejal.
Por otra parte, las autoridades municipales instarán a la Administración autonómica a que se encargue del funcionamiento y mantenimiento de estas nuevas instalaciones. La empresa Aquagest gestiona la otra depuradora del río Arenteiro, con cargo a los recibos que cobran a los ciudadanos. Así, el coste por el consumo de agua potable se duplica debido al canon de saneamiento.
Por ese motivo, Bernardo García afirma que los contribuyentes no pueden soportar un nuevo incremento de la tasa y que debe ser la Xunta la que asuma el gasto del funcionamiento de la depuradora del Carrás.
Las instalaciones se han puesto en marcha en periodo de prueba, que se prolongará durante un año. Las autoridades locales pretenden que Augas de Galicia realice la conexión de las acometidas antes de recepcionar la obra, todavía en manos de la constructora Taboada y Ramos. Asimismo, esperan arrancar a los responsables autonómicos el compromiso para que se hagan cargo de su gestión en el futuro.
La depuradora dispone, además del habitual tratamiento físico y biológico de las aguas, de un novedoso sistema, que consiste en unos filtros destinados a eliminar sólidos de hasta cuatro micras para luego permanecer en reposo bajo la radiación de rayos ultravioleta.
El entorno más afectado es el de las calles Solana, San Benito y A Saleta, entre otras. Al no ser completada la obra de conexión con la red general, las viviendas y demás establecimientos de este entorno siguen vertiendo sus aguas residuales directamente al río Carrás. Un contrasentido, si se tiene en cuenta la inversión millonaria realizada precisamente para acabar con la contaminación de sus aguas, que recogían hasta el inicio de las pruebas la mitad de las residuales de Carballiño, de algunos pueblos de los alrededores y también las procedentes del polígono industrial y parque empresarial.
El informe que redactará Aquagest reflejará el número de inmuebles que todavía vierten directamente al río y su repercusión en el rendimiento de la depuradora.
Bernardo García declaró que el informe será remitido a Augas de Galicia, acompañado de la correspondiente solicitud para que se haga cargo de la financiación de las obras necesarias, 'porque o Concello non pode asumir o seu alto coste', aseguró el concejal.
Por otra parte, las autoridades municipales instarán a la Administración autonómica a que se encargue del funcionamiento y mantenimiento de estas nuevas instalaciones. La empresa Aquagest gestiona la otra depuradora del río Arenteiro, con cargo a los recibos que cobran a los ciudadanos. Así, el coste por el consumo de agua potable se duplica debido al canon de saneamiento.
Por ese motivo, Bernardo García afirma que los contribuyentes no pueden soportar un nuevo incremento de la tasa y que debe ser la Xunta la que asuma el gasto del funcionamiento de la depuradora del Carrás.
Las instalaciones se han puesto en marcha en periodo de prueba, que se prolongará durante un año. Las autoridades locales pretenden que Augas de Galicia realice la conexión de las acometidas antes de recepcionar la obra, todavía en manos de la constructora Taboada y Ramos. Asimismo, esperan arrancar a los responsables autonómicos el compromiso para que se hagan cargo de su gestión en el futuro.
La depuradora dispone, además del habitual tratamiento físico y biológico de las aguas, de un novedoso sistema, que consiste en unos filtros destinados a eliminar sólidos de hasta cuatro micras para luego permanecer en reposo bajo la radiación de rayos ultravioleta.
