El alcalde considera las últimas imputaciones una 'cacería política'

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photo_camera El alcalde, Agustín Fernández, y la concelleira de Medio Ambiente Susana Bayo esta mañana en Montealegre (M. PINAL)

El regidor de Ourense, Agustín Fernández, ha señalado que denuncias como la reciente por la adjudicación de las obras de la calle Bedoya tienen como objetivo "derribar un gobierno democráticamente elegido".

Fernández hizo esta afirmación a preguntas de los periodistas, relacionadas con su reciente imputación en la adjudicación de las obras de la calle Bedoya, en la que ha sido imputada toda la Junta de Gobierno de 2008, conformada por PSdeG y BNG.

Tras participar en la presentación de las nuevas huertas ecológicas, el regidor socialista ha cuestionado el "cúmulo de denuncias que lo que buscan es una imputación" tras considerar que lo más lógico en caso de posibles irregularidades es acudir a la "vía contencioso-administrativa".

"Todas estas denuncias por el ámbito penal son, no para hacer justicia, no para conseguir una condena, sino para buscar una imputación y derribar un gobierno democráticamente elegido por los ciudadanos", apostilló Fernández, quien enmarcó dichas imputaciones a "intereses espurios y particulares" y no con el fin de "defender intereses colectivos".

En la imputación de las obras de la calle Bedoya, el regidor ourensano ha recordado que "no hay imputación criminal alguna" por lo que ha preguntado "si es razonable" que la concejala de Urbanismo, Áurea Soto, actualmente imputada en cinco causas, esté imputada en este caso "por no enseñarle un Plan General de Ordenación Municipal" a un promotor antes de abrirse el plazo de exposición pública.

En esta misma línea, ha recordado que la Junta de Gobierno "funciona como un órgano de gestión política" y que "no fiscaliza el contenido de los proyectos, sino que los aprueba".

Así, ha planteado el supuesto relativo a qué sucedería si la ministra Ana Pastor presentase las obras de la Estación del AVE a Ourense y después preguntasen al ministro de Cultura José Ignacio Wert "si apoyó la realización de esa obra", o "si conocía el contenido de la misma".


"Diría que no", apostilló.

Por este motivo, ha considerado que dichas denuncias -en su mayoría presentadas por Democracia Ourensana- responden a un interés de "instrumentalizar" la justicia, para recusar al alcalde y al resto de cargos, por "intereses bastardos" por parte de particulares y partidos políticos.

El regidor ourensano, quien ha pedido respeto a la "presunción de inocencia", ha criticado estas imputaciones, tras asegurar que aunque pueden no parecer nada para un político "no es lo más adecuado", al llevar aparejado en muchas ocasiones la opinión generalizada de posible corrupción.

En lo que respecta a los tiempos para tomar una decisión respecto a los cargos imputados, se ha remitido al criterio establecido por el Partido Socialista, de apartar a los cargos en caso de abrirse proceso oral, y ha insistido en respetar la presunción de inocencia, que muchas veces "no se percibe", tras recordar que ser imputado "no implica culpa".

"Si por ir a declarar como imputado tienes que apartarte del partido, hay algo que chirría", apuntó.

Finalmente, Fernández ha mostrado su rechazo a las imputaciones de funcionarios en este proceso, que a su juicio responden a un "daño colateral" fruto de "este acoso político" basado en "intereses turbios" por parte de ciertas personas" para derribar al gobierno municipal.

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