El proyecto de Apes, iniciado en febrero, contó con cuatro colegios
"El voluntariado es una oportunidad"; fue el mensaje que ayer transmitió Raquel Crespo, presidenta de la Asociación para la prevención de la exclusión social, Apes, en el acto de clausura del proyecto “Engánchate al voluntariado” que tuvo lugar en el colegio Santo Ángel.
Esta iniciativa, que comenzó en febrero y está enmarcada en una de las líneas de actuación que la Fundación Barrié tiene en colaboración con Instituciones Penitenciarias, contó con la implicación de más de 100 estudiantes de los colegios Concepción Arenal, Divina Pastora, Santo Ángel y Luis Vives (centro que ayer no pudo asistir a la clausura). Raquel Crespo incidió en que "participar en estos proyectos de voluntariado siempre deja algo en cada uno" y, entre otros aspectos, destacó la importancia de "trabajar en comunidad".
Por parte de la Fundación Barrié tomó la palabra Isabel Pérez, que también puso un especial énfasis en los beneficios de trabajar en el voluntariado y afirmó que, además, "tiene un beneficio colateral. Ahora ya no sólo se busca la excelencia, como en nuestro caso con las becas de posgrado, sino también los valores de la persona, y uno de los indicadores para acreditarlos es haber sido voluntario".
En el acto, que contó con una representación de alumnos de tres centros, también estuvo el director del centro de Pereiro de Aguiar, Luis González, ya que los reclusos han tenido un papel importante en este proyecto; primero, impartiendo charlas a los estudiantes y, después, participando desde la cárcel arreglando juguetes o elaborando instrumentos musicales con materiales reciclados. Los centros escolares llevaron a cabo los proyectos con la Fundación San Rosendo y Down Ourense, que ayer resumieron brevemente los jóvenes voluntarios, ofreciendo incluso un pequeño concierto con reciclados.
