Un grupo organizado que traficaba con drogas en la ciudad fue desarticulado por la Policía Nacional el pasado miércoles, en una operación histórica en la que se interceptaron de la distribución callejera 7,5 kilos de cocaína (nunca se había hallado tanta cantidad).
Localizaron a sus miembros -y los detuvieron con algún que otro contratiempo- en medio de un intercambio que estaban llevando a cabo en el Carrefour de Barbadás. Se trata de cuatro ciudadanos colombianos que estaban asentados en la calle Greco del barrio de O Couto. Allí tenían su base de operaciones, que no había pasado desapercibida para los agentes del Cuerpo Nacional. Ya vigilaban al líder y controlaban los movimientos del grupo desde hace tiempo.
La operación continúa abierta pero durante el intercambio detuvieron a tres miembros. Dos de ellos ingresaron en prisión provisional -comunicada y sin fianza-. Un cuarto, el líder, que además tenía antecedentes penales, logró escapar y a bordo de su vehículo llegó a Madrid. Allí acabó su travesía, pues también fue localizado por los agentes. Junto al miembro restante quedó en libertad provisional. Ahora están siendo investigados por un delito contra la salud pública, que se castiga con penas de prisión de tres a seis años y una multa del tanto al triplo del valor de la droga.
Cerca de 700.000 euros
La trama ocurrida en la ciudad está enlazada con un grupo de tráfico de estupefacientes con base en la capital. Estaban conectados con Colombia y recibían sustancias que repartían por toda España.
Uno de los hombres detenidos en Ourense tenía el coche balizado por los agentes que, siguiendo su pista, los llevó a descubrir un botín de casi 700.000 euros en una villa de la provincia de Granada. Estaban ocultos en un almacén que tenía la banda.
Por tanto y dados los frutos que surtió el viaje a Granada de este miembro residente en Ourense, no se descartan nuevas detenciones que puedan surgir a través de herramientas de geolocalización.