Las residencias de mayores de Ourense se sitúan estos días en el punto de mira de la opinión pública ourensana. Cada día afloran decenas de nuevos positivos, más que nunca, y en plena etapa de control de la pandemia. ¿Qué está pasando? ¿Sigue habiendo contagios en masa? Todas las fuentes consultadas coinciden en lo mismo, ahora están aflorando casos que no son nuevos, que llevan días, incluso semanas, activos en los centros residenciales, donde el virus circuló un tiempo sin freno .
ESPERA INICIAL
"El primero positivo lo tuvimos el 21 de marzo, y hasta el 1 de abril no pudimos saber exactamente a qué nos enfrentábamos", explican desde la Fundación San Rosendo. Y es que desde el primer caso en la residencia La Esperanza, hasta el estallido del centenar de casos casi dos semanas después, los residentes estaban separados en grupos y se extremaban las precauciones. Pero el virus ya campaba a sus anchas, especialmente entre usuarios y trabajadores no sospechos, al estar asintomáticos."Ahora se están haciendo test masivos, a todas las residencias donde había casos sueltos, por eso cada día salen 40 o 50 casos nuevos", explican desde el área sanitaria de Ourense, donde son sus profesionales de atención a domicilio los que realizan las pruebas diagnósticas en estas residencias de mayores.
Hace una semana, cambió la situación
"En Galicia, tomouse a decisión hai unha semana de facer un cribado en todas as residencias, tanto a coidadores como a residentes, para detectar precozmente os casos que están empezando unha infección, aínda que non teñan unha sintomatoloxía importante, separando daquelas persoas que están negativas", explica Félix Rubial, gerente del área sanitaria de Ourense.
"O virus utiliza os humanos como vectores, desde o momento en que se marcan medidas de confinamento, a expansión do virus diminúe, e desde que deixou de haber visitas nas residencias, o virus diminúe. Pero ata entón, o virus circulaba polas residencias como circulaba nas residencias como o facía nas nosas casas, nos campos de fútbol ou nas manifestacións", añade Rubial.
Ahora mismo, la interacción social en las residencias se reduce a la de los cuidados, pero también por ahí entra el virus. "Os maiores son vulnerables, estean en residencias sociosanitarios ou no seu domicilio e, por tanto, convírtense nas vítimas predilectas deste virus", continúa
¿Por qué hay más casos en las residencias ourensanas?
TOMA DE MEDIDAS
Ahora mismo, y lo que transmiten desde Sanidade a las residencias, es que lo importante una vez conocidos los resultados es que sirvan para separar a los mayores una vez tengan la radiografía completa de la situación, "como, por exemplo, fixo San Rosendo, separando en varios locais aos que teñen infección e os que non, e separando os profesionais que atenden os positivos e os negativos".Hay profesionales de residencias, como Quercus de Leiro, la de la mancomunidad den Trives, la de A Veiga, o la municipal de Quintela de Leirado –cuatro ejemplos entre muchos otros que continúan surgiendo– que deciden confinarse para minimizar riesgos. "Non é imprescindible, non todos están en situación de non poder volver ás súas casas. O que hai é que adoptar as medidas de protección adecuadas".
A LA ESPERA DE LAS PRUEBAS EN MÁS RESIDENCIAS
Hay muchas residencias, como las de la Fundación Valdegodos, que tiene cinco centros en la provincia (2 en Vilamartín, y 1 en A Rúa, Ramirás y Viana), que confinaron a todos los trabajadores y que están esperando, precisamente, a esos test. "Cuando sepamos esos resultados, se terminará el confinamiento pero se seguirá trabajando con normas muy estrictas de seguridad", indica Miguel Blanco, presidente de la Fundación Valdegodos.
En la residencia de Chandrexa, donde el pasado sábado detectaron el primer caso positivo, personal sanitario acudió al centro a realizar las pruebas a todos los que tuvieron contacto con el residente, todos ellos negativos, aunque no se realizó el cribado masivo.
El problema del material
Mientas esperan a conocer resultados, si se soluciona el problema de los defectos de los test entregados por el Gobierno central, los centros residenciales empezaron a recibir ayer nuevo material de la Xunta de Galicia, que hizo entrega de un cargamento de elementos de protección. "Se puede decir que hoy nos sentimos como si hubiesen llegado los Reyes Magos", manifestaban.Precisamente, el presidente de la Federación Empresarial de Dependencia, Ignacio Fernández-Cid, explica que "la mayoría de residencias adoptaron, incluso antes de que fuera preceptivo, protocolos y medidas de aislamiento, pero es inevitable que los profesionales entre y salgan del centro a sus casos o de una habitación a otra". Por ello, recalca la necesidad de "materiales y recursos humanos".
Los test "detectan si se producen anticuerpos pero, en ese análisis global, no permiten saber si se trata de una fase aguda del COVID-19 o si aún permanecen en sangre porque ya hay curación".
Ahora evalúan destinar estos test a un estudio epidemiológico para obtener información sobre la exposición de la población al virus.