Un vecina de Trasiglesia (Vilardevós), Dominga Colmenero Gómez, de 61 años, fue hallada muerta en un barranco de la carretera que enlaza Verín y Soutochao cuando estaba siendo buscada por la Guardia Civil y sus familiares. La mujer faltaba de su domicilio desde el pasado día 14 de marzo, aunque su desaparición no fue denunciada hasta la tarde de este pasado miércoles.
Las primeras hipótesis apunta a que Dominga Colmenero sufrió el pasado día 14 un accidente de circulación cuando se dirigía a su domicilio desde Verín. Su vehículo, según la Guardia Civil, se salió de la calzada, en el kilómetro cinco, cerca de Bemposta (Vilardevós), y cayó por una ladera, a más de 100 metros de profundidad, lo que impedía que fuera visto desde la carretera. Un hermano suyo localizó ayer el cadáver cuando buscaba por el vial pistas que le permitieran localizarla.
Dominga Colmenero estaba soltera y vivía sola. Su familia se percató de su ausencia, pero en un principio creía que se había marchado para pasar unos días con alguna amiga a Madrid, a donde viajaba con frecuencia. Pero esta sospecha se fue desvaneciendo a medida que pasaban los días y la fallecida no respondía a las llamadas a su teléfono móvil y sus compañeras desconocían su paradero. Así, su hermano presentó la denuncia por desaparición y comenzó a buscarla por el pueblo y por la carretera.
Su coche se salió de la calzada en una curva, dando varias vueltas de campana hasta parar en una zona de abundante maleza. La fallecida llevaba puesto el cinturón de seguridad y tenía el teléfono móvil a su lado. Los bomberos de Verín tuvieron que cortar parte de la carrocería para rescatar el cadáver, que fue traslado al Hospital de Verín para realizar la autopsia.
Dominga Colmenero estaba soltera y vivía sola. Su familia se percató de su ausencia, pero en un principio creía que se había marchado para pasar unos días con alguna amiga a Madrid, a donde viajaba con frecuencia. Pero esta sospecha se fue desvaneciendo a medida que pasaban los días y la fallecida no respondía a las llamadas a su teléfono móvil y sus compañeras desconocían su paradero. Así, su hermano presentó la denuncia por desaparición y comenzó a buscarla por el pueblo y por la carretera.
Su coche se salió de la calzada en una curva, dando varias vueltas de campana hasta parar en una zona de abundante maleza. La fallecida llevaba puesto el cinturón de seguridad y tenía el teléfono móvil a su lado. Los bomberos de Verín tuvieron que cortar parte de la carrocería para rescatar el cadáver, que fue traslado al Hospital de Verín para realizar la autopsia.
