La cesión completa de la capilla de Os Remedios a la Iglesia ha culminado ya, por lo que ahora se abre el camino para lograr la financiación que permita rehabilitar el templo, calcinado por un incendio en julio de 2010.
El alcalde de la ciudad, Agustín Fernández, emplazó ayer a todas las administraciones implicadas -además del Concello y la Iglesia, la Xunta y la Diputación- a 'poñerse a traballar arreo' para abordar las obras 'co obxectivo irrenunciable de que o próximo 8 de setembro -día de la festividad de la Virgen de Os Remedios- a nova capela estea a servizo dos fieis'. ?El regidor considera necesario 'atopar as ferramentas de financiamento precisas' para lograr el presupuesto de la obra, que superaba ampliamente los 500.000 euros, según el proyecto de rehabilitación realizado en su día por la Xunta. En este tiempo, no obstante, el Obispado planteó la posibilidad de acondicionar el templo para el culto en el caso de que las administraciones no contasen con una partida económica tan elevada para este fin. ?Agustín Fernández recordó que la capilla está 'ubicada nun lugar estratéxico e representa moito para os ourensáns, non só dende o punto de vista relixioso senón tamén dende o cultural ou o turístico'. De hecho, el templo es Bien de Interés Cultural, junto con el Puente Romano, motivo por el que el alcalde ourensano considera que la capilla no debe pasar 'outro ano máis no seu actual estado de abandono'. ?Así las cosas, la propuesta del Concello ourensano es que las instituciones implicadas -también podría incluirse al Estado para que aportase fondos con cargo al 1% cultural- establezcan un compromiso real para la reforma del templo. Desde el momento del incendio fueron varios los encuentros para tratar de buscar una solución que concretase las obras. Sin embargo, no fue hasta que todos los propietarios de la capilla cedieron la titularidad a la Iglesia hasta que el camino quedó desbloqueado, puesto que las administraciones no pueden intervenir en propiedades privadas. El Concello alertó a Patrimonio en mayo pasado del deterioro del templo.
