María Blanco: "Al investigar debes tener claro que quieres ayudar a los demás"

María Blanco nació en París (Francia), pero cuando tenía un mes de vida su familia regresó a Trives. Tras licenciarse en Farmacia por la Universidade de Santiago de Compostela (USC) y seguir formándose en París, consolidó su trayectoria investigadora en Navarra, donde trabaja como catedrática de la Universidad de Navarra. Blanco vuelve a Trives cada vez que puede: estos días aprovecha su estancia en la provincia para dar a conocer su trabajo, centrado en nanomedicina y cáncer infantil. Hoy hablará con alumnado del colegio Divina Pastora de la ciudad y con estudiantes del CIFP A Carballeira. ¿Siempre supo que quería dedicarse a la investigación? Tenía claro que quería ayudar a los demás, y encontré una forma de hacerlo a través de la investigación. Para trabajar en esto tienes que tener muy claro que quieres ayudar, aunque haya fracasos, aunque no todo salga a la primera. Tienes que seguir intentándolo. Hoy hablará de su línea de investigación, centrada en nanomedicina y cáncer. Voy a explicar cómo la nanomedicina, o nanotecnología, que es lo mismo, puede ayudar a tratar un tumor sin matar las células sanas. ¿Qué quiere decir? En el caso de los niños con cáncer, por ejemplo, al tratarlos con quimioterapia en edades tan tempranas aumenta el riesgo de que cuando sean adultos desarrollen insuficiencia cardíaca, pulmonar o renal, entre otras. La nanomedicina permite disminuir la toxicidad y atacar sólo a las células enfermas, protegiendo así las células sanas. ¿En qué tipo de cáncer ha realizado sus estudios? Ahora mismo estamos investigando la aplicación de la nanomedicina en el osteosarcoma y neuroblastoma infantil, considerados enfermedades raras por su baja prevalencia. Es una investigación financiada por la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). ¿Cree que la pandemia ha ayudado a ver la importancia de la investigación? Quizás lo permitió ver en el momento, pero parece que con el tiempo nos hemos olvidado. Lo que sí es cierto es que con la covid en nanomedicina hubo una inflexión. Las vacunas de Pfizer y Moderna, que demostraron su eficacia, están hechas con nanotecnología. Ambas vacunas, de hecho, han motivado muchas investigaciones vinculadas a vacunas para el cáncer, por ejemplo. ¿Falta más inversión? Sí, pero es cierto que nuestra labor investigadora en España es muy importante y valiosa, aunque tengamos menos recursos que otros países. En el caso del cáncer infantil, ¿son menos los recursos? Como se consideran enfermedades raras, por la baja prevalencia, hay menos recursos para investigación en comparación con otros tipos de cáncer más habituales. En muchos casos, son las familias de los niños enfermos los que hacen asociaciones para recaudar dinero que luego nos permite investigar. Hay muchos padres que promueven eventos y actividades benéficas para conseguir recaudación. De hecho, a veces sus hijos ya han fallecido, pero ellos siguen adelante con los proyectos para ayudar a otros niños. Es gente admirable, la verdad.