La provincia arrancó el año con menos de un 10% de su población con inmunidad natural, la que se adquiere al haber superado la infección por covid. Un 8,6% de lo ourensanos se contagiaron en los casi dos años de pandemia, un porcentaje inferior al que se registra en el conjunto de Galicia con un 9,4% de los gallegos.
El incremento de los contagios en las últimas semanas incrementará las cifras al concederse nuevas altas, pero continuará con un balance bajo de población infectada. Por el momento, la provincia superó ayer la barrera de los 5.000 casos activos y sigue en máximos de toda la pandemia. La presión asistencial experimentó un ligero incremento en planta, pero mantiene a seis pacientes en UCI.
El número de nuevos contagios diarios descendió ayer a más de 300, tras varias jornadas por encima de 600. Los puntos de cribado con acceso libre retomaron su actividad, tras un parón el día de Año Nuevo. Esta semana, solo el jueves no abrirán sus puertas con motivo del festivo de Reyes.
Dos concellos sin casos
Porqueira y Calvos de Randín son los únicos concellos ourensanos que no registran positivos por covid. El listado de municipios afectados lo lidera la ciudad con 2.271 casos activos, seguido de O Barco que supera los 400. Entre los 200 y los 300 infectados oscilan Barbadás, Verín y Carballiño.
